LOS RECORTES EN AYUDAS PARA LOS DEPENDIENTES DEJA A FAMILIAS DESAMPARADAS

Tres años esperando una plaza en un centro de autismo: "Mi hijo tiene 40 años y pesa 40 kilos más que yo. Me es imposible cuidarle"

El recorte de 2.000 millones de euros en la última legislatura del PPpara los dependienteses demoledor para personas con Trastorno de Espectro Autista. El sistema de evaluación se ha endurecido, los centros educativos han reducido el número de profesores de apoyo y ha aumentado la ratio en las aulas. Una familia de Madrid lleva tres años pidiendo una plaza en un centro de autismo.

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Son muchas las familias que no saben cómo van a salir adelante tras el recorte de 2.000 millones de euros que la última legislatura del PP ha hecho a las ayudas para los dependientes que afecta particularmente a las personas con Trastorno de Espectro Autista.

José María es autista y lleva tres años en lista de espera para conseguir una plaza en un centro especializado en autismo. Un calvario que esta familia asegura estar sufriendo. "Quiero que mi hijo vaya a un centro de autistas, porque no hay derecho, es una canallada", se queja Teresa Ortega Piga, su madre.

Su lucha contra la Comunidad de Madrid comenzó en febrero de 2013 cuando solicitaron una plaza de residente en el centro 'Nuevo Horizonte'. Un centro al que José María llevaba 25 años ligado. Aseguran que pidieron ese internamiento porque ellos ya no podían hacerse cargo de él.

"José María tiene 40 años y mide 10 centímetros más que yo y su peso es 40 kilos superior al mío, luego, es imposible hacerse cargo de él", explica Guillermo Sautier-Casaseca, su padre.

Mientras le concedían la plaza de residente, José María dejó de ir al centro. Faltó cuatro meses. Una ausencia que, según denuncian, la Comunidad de Madrid aprovechó para darle de baja y quitarle la plaza de día. Desde entonces José María está en casa.

"Eso es una vergüenza porque está claro que si le habíamos llamado para decirle que nos cambiara a interno sería porque no le podíamos llevar", denuncia el padre. Desde entonces José María está en casa. En este tiempo, la comunidad de Madrid les ha ofrecido otros centros alternativos, pero ellos los han rechazado. Aseguran que ninguno era para personas autistas y se niegan a que su hijo vaya a peor.

Exigen su readmisión en el centro 'Nuevo Horizonte' para que José María pueda estar con sus amigos de siempre y recibir las terapias que tanto necesita.