Sinhogarismo nombra un fenómeno social, un problema -el de las personas que viven en la calle- estructural, no individual, sino de toda la sociedad. No se debe usar la expresión "personas sin techo", porque va más allá de eso, ya que lo que no tienen es una vivienda segura y permanente.

José Manuel Caballol, director general de 'Fundación Hogar sí' asegura que utilizar el término "sin techo" es "lo mismo que si al desempleo le llamamos el problema de las personas que no tienen trabajo".

En España 23.000 personas sin hogar acuden a albergues, y otras 8.000 personas no reciben ningún tipo de atención. Además, se calcula que unas 31.000 no tiene una vivienda digna.

Según José Manuel Caballol, "al sinhogarismo se llega desde muchos sitios, como la muerte de un familiar, la pérdida de empleo, el desahucio o la violencia infantil".

La esperanza de vida para ellos es 20 años menor que la de la población general. En la calle, son víctimas de violencia: cada 18 días una persona sin hogar es agredida y, cada seis, una muere en la calle.

De las personas sin hogar, ocho de cada diez son hombres: solo hay un 20% de mujeres. El 10 de octubre es el día de las personas sin hogar y 'Fundación Hogar Sí' recuerda que el sinhogarismo es una etapa más de la vida: casi un 5% de la población la experimenta alguna vez.

El 7 de diciembre todos podemos unirnos a la mayor cita solidaria de este tipo: la noche sin hogar. Si estás interesado, puedes conocer la iniciativa entrando en la web www.lanochesinhogar.org.