Flores, trajes, zapatos... todo lo que se le ocurra a los novios lo pueden encontrar en Fuente Palmera, Córdoba. Un pueblo conocido como 'el de las bodas' y es que para hacerse una idea, en apenas 3.000 metros cuadrados del casco antiguo hay más de 40 empresas especializadas en bodas.

Todo surgió por una tienda en 1980. Desde entonces, Fuente Palmera presume de músculo en el sector gracias a la valentía de un panadero. "El germen de todo fue esta tienda, Higar Novias. Empezó por el dueño que trabajaba en una panadería y decidió cambiar el rumbo de su vida y dedicarse a esto sin tener ni idea", explica Esperanza García, encargada de Higar Novias.

Un negocio que hoy mueve hasta 20 millones de euros al año. "Para un pueblo pequeño, de casi 10.000 habitantes son cifras muy grandes", asegura Manuel Adamez, presidente de la Asociación Empresarial de la Colonia de Fuente Palmera.

En la misma tienda, también se puede contratar la luna de miel. Un sector que no para de crecer, pero ahora se encuentra con un problema, la falta de costureras. "Muchos talleres con la pandemia han cerrado y no han vuelto a abrir porque ya tenían una edad y no tienen nadie que les sustituya", cuenta Esperanza García.

Otro elemento que no puede faltar en una boda son las flores. Solo con un paseo por este pueblo, la boda casi que sale sola. Ahora son los novios quienes tienen que empezar a escribir su historia.