Según el comunicado, unas 300 personas se congregaron este sábado en una rotonda de la localidad para expresar su malestar por la oleada de robos que las viviendas y comercios de Estepa han sufrido en los últimos meses.
La Guardia Civil, ante la posibilidad de que en la manifestación se diese algún brote violento, desplazó dos coches patrullas con agentes con la intención de informar a los manifestantes de la no existencia de autorización para la convocatoria, pero sin ánimo de disolverlos, según el consistorio.
Sin embargo, algunas personas del grupo decidieron acudir a las viviendas donde residen los supuestos autores de los robos y se produjeron actos violentos que acabaron con el asalto, sustracción de enseres de valor del interior de las viviendas, y algunas de ellas fueron incendiadas.
Todas las viviendas estaban vacías en el momento del asalto, por lo que no se han producido daños personales ni enfrentamientos, y la Policía local ha precintado todas las viviendas donde se han producido asaltos.