Los Mossos han detenido a cuatro personas y han dado por desmantelado un grupo al que achacan la comisión este mes de al menos 12 robos en pisos de una misma calle del distrito de Sants-Montjuïc de Barcelona, que previamente marcaban con una señal cuando comprobaban que sus dueños estaban de vacaciones. Llegaban incluso a forzar los buzones de los edificios para comprobar que, efectivamente, sus propietarios estaban de vacaciones.
Los cuatro detenidos son ciudadanos georgianos de entre 29 y 51 años que el pasado día 17 ingresaron en prisión por orden del juez y a los que se considera autores de siete robos en domicilios y de otros cinco en grado de tentativa, según ha informado la policía catalana.
Los Mossos montaron un dispositivo de control al constatar un aumento de los robos en pisos de una misma calle del distrito de Sants-Montjuïc cometidos, presuntamente, por una banda especializada que actuaba siempre de la misma manera y que, antes de acceder a la vivienda, ponía marcadores de plástico en las puertas de aquellas que se encontraban vacías.
Tras registrar dos domicilios relacionados con los miembros de la banda, los Mossos encontraron unas 70 joyas supuestamente robadas, 3 relojes, 3 móviles, 250 dólares, 300 euros, dos ordenadores portátiles y numerosas herramientas para forzar cerraduras. La policía no descarta que la banda haya llevado a cabo más robos en inmuebles de la zona, ya que han encontrado marcadores en numerosas puertas, por lo que es posible que cuando sus inquilinos lleguen de vacaciones se encuentren con sus pisos desvalijados.