La Dirección General de Tráfico (DGT) ha organizado un dispositivo para atender el incremento de la circulación que se producirá con motivo de las fiestas del 15 de agosto, un fin de semana largo en el que se harán más de 25.000 pruebas de alcohol y drogas en una campaña especial.

Tráfico espera que se produzcan 6,3 millones de desplazamientos por las carreteras españolas entre el viernes 12 de agosto y el lunes 15. Se trata de uno de los fines de semana con mayor número de desplazamientos cortos del año, por ser las fiestas patronales en muchas localidades, por lo que se extremará la vigilancia en ese tipo de trayectos, además de dar cobertura a los viajes del interior a las zonas de costa.

Madrid, Castilla-La Mancha y Extremadura absorberán el 23 % de los desplazamientos, Andalucía el 22 % y las regiones de Levante el 19 %, según Tráfico, que dispondrá de más de 600 funcionarios y personal especializado en los centros de control, de 10.000 guardias civiles en las carreteras y de 13.000 empleados de conservación.

Habrá carriles reversibles y adicionales en las horas de mayor afluencia circulatoria; se paralizarán las obras en las carreteras, se limitará la celebración de pruebas deportivas y eventos que ocupen la calzada y se restringirá la circulación de camiones en ciertos tramos, fechas y horas.