Rajoy, en su intervención inicial en el debate sobre el estado de la nación, ha asegurado que a España "se le ha abierto el horizonte" y se ha mostrado convencido de que el país será capaz de recorrer todo el camino que falta hasta que la recuperación sea completa. "Ahora avanzamos en la buena dirección", ha subrayado el jefe del Ejecutivo.

El presidente del Gobierno ha garantizado que no se dará por satisfecho ni descansará "hasta que el peor rostro de la crisis, que es el paro, comience a disminuir con fuerza". En su discurso en el debate del estado de la nación en el Congreso, el presidente ha afirmado que "la creación de empleo es el eje vertebrador de todas nuestras iniciativas, no diré en política económica, en política sin más".

Rajoy ha recordado a los más de cinco millones y medio de parados, aunque ha dejado claro que "el empleo no es la gran tarea pendiente, como si hasta ahora hubiéramos estado dedicados a otra cosa, lo hemos atendido desde el primer día". El presidente ha asegurado que todas las iniciativas en España, en Europa y en el mundo tienen el propósito de devolver a los parados el bienestar que da el empleo para que las familias se abran camino por sus propios medios.

Asimismo, ha señalado que el problema del empleo no es algo que se pueda abordar directamente, sino que se da por otras medidas que no son sencillas y que exigen tiempo para dar sus efectos. En este sentido, ha destacado que esas medidas no son aisladas ya que obedecen a una política articulada y pretenden "remover los obstáculos" que impedían crear empleo.

Rajoy ha enumerado los "desarreglos" que sufría la economía española como el déficit exterior, la falta de competitividad, el sistema financiero, el estancamiento, la desconfianza, la normativa laboral con el despido como único ajuste. Además, ha incidido en la importancia de hacer un diagnóstico correcto de los desequilibrios para saber cuáles son las reformas que hay que aplicar para corregirlos.