Michel Berokoirigoin, Michel Tubiana y Jean Noel Etcheverry, todos cabezas visibles de diferentes movimientos sociales en el País Vasco Francés y ahora detenidos en una operación de la Gendarmería en colaboración con la Guardia Civil. Los tres se ofrecieron a ETA para ayudar en el proceso de destrucción de su arsenal, el último paso para la disolución de la banda terrorista.

Un ofrecimiento aceptado por la organización y que hoy ha hecho público el diario Mediabask: "Delegamos en la sociedad civil la responsabilidad política del desarme. La realización del proceso se llevará a cabo bajo vuestra entera responsabilidad. Nuestro objetivo es el de poder declarar lo antes posible que ETA no es ya una organización armada".

Según el entorno de los detenidos el viernes iban a escenificar la destrucción simbólica del 15% del arsenal cuando las autoridades galas les arrestaron. Para el Gobierno de España es un golpe importante contra la logística de ETA. La última gran operación acabó con el jefe de la organización Mikel Irastorza el pasado mes de noviembre.

"El material que se ha intervenido era importante y además algunas de estas personas estaban custodiando el propio arsenal que ha sido intervenido" ha asegurado Zoido. El ejecutivo vasco que preside Iñigo Urkullu ha emitido un comunicado en el que valora el paso de ETA y dice que el desarme debería ser verificable y definitivo. Desde el gobierno vasco recalca que esto solo indica que la banda está inmersa en un proceso de desarme unilateral.

En la misma línea se ha pronunciado Arnaldo Otegi: "Yo creo que hay una estrategia por parte del Estado de sabotaje permanente". La operación policial en el suroeste de Francia continúa abierta. Entre los detenidos también se encuentra la propietaria de la casa donde guardaban las armas y explosivos.