Junts pel Sí y la CUP han registrado en el Parlament un documento, una declaración de nueve puntos en la que se llama al futuro gobierno catalán a romper con las instituciones españolas. En el documento aseguran que “el proceso de desconexión democrática no se supeditará a las decisiones de las instituciones del Estado español, en particular del Tribunal Constitucional”. Alberto Botrán, portavoz de la CUP, dice que van hacia “un proceso de un estado independiente no subordinado al estado español”. El documento añade que ese estado tendrá forma de república.

La declaración se va a tramitar por la vía de urgencia, de forma que tendría que aprobarse en la primera sesión del nuevo Parlament. Antes incluso de que haya investidura de un President. Raül Romeva mostraba su voluntad de que "esta no sea otra legislatura autonómica, si no que sea la última legislatura de este tipo".

Las dos formaciones independentistas piden negociar ahora esa secesión con el Estado español y la Unión Europea. Ademas piden respeto al Gobierno. La resolución prevé que en un plazo máximo de 30 días se inicie la tramitación de las "leyes de proceso constituyente, de seguridad social y de hacienda pública", que deben servir para poner las bases de estructuras de Estado imprescindibles para la "desconexión democrática" de Cataluña con respecto al conjunto de España.

La resolución también prevé que el Parlament adopte las medidas necesarias para abrir este "proceso de desconexión democrática, masiva, sostenida y pacífica con el Estado español", de manera que permita el "empoderamiento de la ciudadanía a todos los niveles y en base a una participación abierta, activa e integradora".