Las imágenes del interrogatorio las publica en exclusiva el portal Infolibre. Muy claro, el Juez Silva defiende que no fue desproporcionado meter a Miguel Blesa, expresidente de Caja Madrid, en la cárcel: "El elemento fundamental era el riesgo de fuga pero por encima de eso la clave era la posible manipulación de pruebas".
Durante su interrogatorio no sólo apunta a Blesa. Le consta que alguien más podía manipularlas y entre ellos nombra al yerno de Aznar. "Como el yerno de José María Aznar, Agag, que conoce estos instrumentos financieros y que los puede utilizar en el banco de Miami para los fines más variados", explica Silva.
Una causa, dice, que tiene intereses muy importantes en juego: "Había muchísimos correos que mencionaban a terceros como el expresidente José María Aznar, como entidades que se dedicaban a la compraventa de armas o los propios familiares de Aznar y había que preservar esto".
Fraudes y trampas eran parte de Caja Madrid. De los 8.000 correos intervenidos, Silva no vacila al concluir que "los correos aclaran que el régimen de comisión delictual es de organización criminal".
En la que, sostiene, Blesa se dedicaba a actividades, no muy relacionadas con la gestión bancaria. "Hay correos en los que sale que se pagan recibos de la Gürtel. Directamente se pagan recibos de Gürtel, facturas del PP"
El juez dibuja una Caja Madrid sin control, de favores y chantajes que involucran también a CCOO: "Hay miembros de comités, concretamente de CCOO que dicen o me pagas 9.000 euros o no voy al acuerdo que hay que tomar. Y obviamente Blesa los pagó".
Silva ya anunció: si tiro de la manta el sistema no lo sosportaría. Su silencio ya empezó a romperse en este interrogatorio.