Ni contratos, ni sobornos, ni enriquecimiento a costa de las arcas públicas. Hasta ahora Matas lo ha negado todo y ha dejado bien claro que no piensa devolver ni un solo euro al Estado porque mantiene que no ha robado nada. Según 'El País' Jaume Matas se plantea cambiar de versión y buscaría una negociación con la Fiscalía para minimizar posibles condenas futuras.
Otros medios hablan de pacto global, es decir, un compromiso entre el exministro y presidente del Gobierno balear y el fiscal Horrach. Este pacto implicaría la confesión de todos los delitos por los que se investiga a Matas y la devolución de las comisiones y dádivas que, según Anticorrupción, se habría llevado.
A cambio a Matas se le rebajarían posibles nuevas cargas penales. Jaume Matas ingresó en la prisión de Segovia el 28 de julio, para cumplir una pena de nueve meses por tráfico de influencias. Pero en la mesa de la Fiscalía su nombre aparece no en una ni en dos, sino en otras 19 causas aún pendiente de juicio. La más importante es el Caso Nóos, en el que Anticorrupción sostiene que su participación fue clave para la trama.
Pero nada de esto habría hecho cambiar de opinión a Matas. Lo que le habría llevado a buscar esa negociación habrían sido las declaraciones de la que fuera una de sus consejeras en el Gobierno balear: Aina Castillo, quien acusó al exministro de haberle ordenado manipular la adjudicación de un hospital por valor de más de 630 millones de euros.
Sin embargo, ‘Más Vale Tarde’ se ha puesto en contacto con la defensa de Matas, que nos asegura que nada de esto es verdad. Ni pacto global, ni negociaciones, ni acercamiento de posturas, ni una sola conversación. Al menos hasta que los abogados conozcan el escrito de acusación del caso Nóos. Una vez tengan conocimiento de la acusación, no descartan negociaciones, eso sí, aseguran que nunca pactarían una devolución de dinero público, ya que siempre han defendido que Matas no se llevó ninguno.