El president de la Generalitat Valenciana, Alberto Fabra, ha asegurado hoy que el cierre de la Radiotelevisión Valenciana (RTVV) es "innegociable" y que se va a seguir un proceso "rápido" para proceder "cuanto antes" al cese de las emisiones de la cadena pública.

Fabra se ha pronunciado así durante su comparecencia en el Palau de la Generalitat ante los medios de comunicación para explicar la decisión de cerrar RTVV, anunciada ayer por su gobierno después de que el Tribunal Superior de Justicia valenciano anulara el expediente de regulación de empleo (ERE) de la empresa pública.

"No tenemos 40 millones de euros para satisfacer la readmisión" del millar de trabajadores de RTVV, ha destacado Fabra, quien ha añadido que ese dinero se necesita para mantener la educación, sanidad y servicios sociales. "No voy a cerrar un colegio o un hospital para mantener Radiotelevisión Valenciana", ha advertido el president, para quien asumir esos 40 millones supondría retrotraerse a hace tres años, algo, a su juicio, "imposible" que "no cabe en el presupuesto" actual de la Generalitat.

En una comparecencia en la que se oían las protestas de los trabajadores de RTVV concentrados frente al Palau, Fabra ha confirmado que la directora general de RTVV, Rosa Vidal, no va a seguir en sus funciones y la ha responsabilizado de parte de las decisiones adoptadas en aplicación de un ERE de cuyo final también ha responsabilizado a los sindicatos.

"No voy a cerrar un colegio o un hospital para mantener Radiotelevisión Valenciana"

Ha afirmado que informó al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de la decisión, aunque ha dejado claro que cuando habla con el Gobierno lo hace para pedir una financiación que garantice los servicios básicos, "no para otras" cuestiones.

Ha señalado que el Gobierno valenciano está centrado en ver cómo puede realizar el proceso para acometer un cierre que será "todo lo rápido que permita la legislación" y cuyo coste no está "cuantificado al detalle", pero ha dicho que aproximadamente será el equivalente a "un año de coste de la propia televisión".

Fabra ha defendido la continuidad del vicepresidente del Consell, José Císcar, el único miembro del Gobierno que le acompañaba hoy, y el trabajo del Ejecutivo pues ha dicho que ha tratado de hacer las cosas "lo mejor posible", y ha avanzado la posibilidad de emprender acciones judiciales contra las empresas que asesoraron a la Generalitat en la elaboración del ERE.

Para Fabra, cerrar RTVV ha sido una decisión "nada cómoda, muy difícil", pero la única posible para seguir avanzando en la prestación de servicios básicos a los ciudadanos, y ha insistido en que "no hay marcha atrás", pues el tiempo de la negociación "ya ha pasado". Ha afirmado que durante el proceso del ERE que, según ha recordado duró un año y medio, el Consell trasladó la necesidad de hacer de RTVV una televisión acorde con las necesidades económicas actuales, pero eso, ha lamentado, "hay alguien que no lo ha entendido o que no lo ha querido entender".

"La única manera de hacer sostenible RTVV" era, según Fabra, reducir el presupuesto de esta empresa de 183 millones a aproximadamente 60 millones, y ha asegurado que la anulación del ERE y la obligación de readmitir a más de un millar de trabajadores es inasumible para el Gobierno valenciano.