Caras tristes tras ver la segunda fumata negra del cónclave. Los fieles convocados en Roma se han repuesto rápidamente haciendo fotos o cantando para pedir que la siguiente fumata sea blanca. Peor lo llevaban los que tienen los días contados en Roma. "Esperábamos la fumata blanca, pero no ha sido posible", asegura una turista. Aunque también tienen ganas aquellos que solo han viajado a Roma para ver el cónclave.

Los peregrinos brasileños son los más optimistas y creen que el próximo papa será de Brasil. Si dependieran de los seguidores hasta allí desplazados, el nuevo papa sería brasileño. El mal tiempo no les permite quedarse o acampar para seguir el cónclave desde la Plaza de San Pedro.