El líder de la autoproclamada república popular de Lugansk, Valeri Bolótov, declara la Ley Marcial y anuncia la movilización de todos los hombres con edades entre los 18 y los 45 años que viven en esa región rebelde del sureste de Ucrania.
"Debido al inicio de acciones militares de las Fuerzas Armadas ucranianas en territorio de la república popular de Lugansk ordeno instaurar la ley marcial en todo el territorio de la república y declarar la movilización total", anunció Bolótov ante los periodistas.
Bolótov también pidió "la intervención de tropas pacificadoras", presumiblemente rusas, "antes de que se produzca una catástrofe humana".
"Según nuestras informaciones, más de 6.000 soldados ucranianos, cuyo número ha crecido en los últimos días" han llegado a la región para enfrentarse a los rebeldes, dijo el líder de los prorrusos.
Nueve soldados ucranianos murieron y al menos otros 20 resultaron heridos en combates con los insurgentes prorrusos cerca de las localidades de Volnovaja y Rubézhnoe, en las regiones rebeldes de Donetsk y Lugansk, confirmó el Ministerio ucraniano de Defensa.
Uno de los militares ucranianos cayó en los enfrentamientos que tienen lugar en los accesos a la ciudad de Lisichansk, en la región de Lugansk, donde al parecer ha empezado una gran ofensiva de las fuerzas de Kiev.
"La Guardia Nacional ha empezado una gran ofensiva para dirigirse a Lisichansk. Hay combates en las afueras de la ciudad; la Guardia Nacional emplea blindados" en su avance, aseguró a las agencias rusas Alexéi Chmilenko, uno de los líderes de esta región rebelde.
Los insurgentes explosionaron un puente sobre un río para dificultar el avance de las tropas ucranianas, reconoció Chmilenko, con lo que desmintió a un portavoz del cuartel general del ejercito sureste, que en declaraciones a medios rusos acusó de la explosión a "un grupo de desconocidos".
La policía local de Rubézhnoe aseguró a la agencia ucraniana UNN que "el combate continúa" en los accesos a Lisichansk a pesar de la destrucción de uno de los dos puentes que unen ambas localidades.
Otros ocho efectivos de las fuerzas ucranianas perdieron la vida cerca de Volnovaja, en la vecina región de Donetsk, según reconoció el Ministerio ucraniano de Defensa.
El ministerio explicó en un comunicado oficial que los soldados murieron en una explosión del blindado en el que iban cuando el vehículo fue atacado por los insurgentes con fuego de mortero y lanzagranadas.
Los milicianos de la autoproclamada república popular de Donetsk informaron de 25 heridos en sus filas y denunciaron víctimas entre la población civil durante la ofensiva ucraniana que, según los rebeldes, empezó esta madrugada.