Tras el apretón de manos histórico entre Barack Obama y Raúl Castro, el deshielo en la relaciones entre Cuba y EEUU continúa. Obama asegura que Washington no será prisionero del pasado y buscará el progreso en las relaciones con Cuba. Castro da a entender que el éxito de los acuerdos se deben exclusivamente a un presidente como Obama.
Intercambio de buenas intenciones entre Raúl Castro y Barack Obama en la Cumbre de las Américas