Las dos caras del PP: alertan del retorno de Puigdemont a la Generalitat mientras se abren a pactar con Junts

La número uno de la lista del PP a las elecciones europeas, Dolors Montserrat, ha asegurado que tras las elecciones europeas el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, entregará la presidencia de la Generalitat de Cataluña al líder de Junts, Carles Puigdemont.

Preguntada por si el PP hará un cordón sanitario contra Junts, el partido de Puigdemont, en el parlamento catalán, Montserrat ha dicho que su partido no será "salvavidas de [el líder del PSC, Salvador] Illa ni de Puigdemont", insinuando que no dará su apoyo a la candidatura de Illa, ganador de las elecciones. "A Puigdemont y a Sánchez les une que son insaciables. Puigdemont, en la independencia de Cataluña, por eso pide indultos, amnistía y referéndum y Sánchez se los da, como le dará la presidencia de la Generalitat, porque a Sánchez solo le interesa el poder, estar en La Moncloa", ha dicho. "A Illa se le está poniendo cara de Iceta [en referencia a que el anterior candidato del PSC ganó las elecciones pero no pudo gobernar], porque tras las europeas, Sánchez le dará la presidencia a Puigdemont, es así, auque a la gente le parezca imposible", ha reiterado.

Un discurso de condena a Junts que contrasta con el anuncio que hacía hace solo un par de días el líder del PP. Alberto Núñez Feijóo abría la puerta a pactar una moción de censura a Pedro Sánchez con Junts. También muy críticos con la ley de amnistía, Dolors Montserrat ha sostenido en sendas entrevistas que el PP español y el europeo serán "el dique de contención" de la "infame ley de amnistía", tras conseguir que la Comisión Europea vigile esta normativa y que su familia europea se comprometa con la defensa del Estado de derecho en España. Otro punto más que les aleja de Junts.

Con todo, la candidata del PP evita entrar en la hipótesis de que Feijóo presente una moción de censura al Gobierno, que dependería para fraguar de los votos de Junts, y acusa al PSOE de "cortinas de humo y tergiversación para aglutinar el voto de izquierda en la última semana de campaña" a pesar de que fue el presidente de su partido el que dejó la puerta abierta a esta herramienta. Una situación que ha sacudido la recta final de la campaña para el 9J.

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