No se cansan de pedírnoslas y entre todas las reformas tienen una favorita. Contener los salarios o bajarlos es la fórmula mágica de Rehn y Lagarde para nuestro país, una purga que para los sindicatos ya no da más de sí. Aunque Bruselas y FMI se empeñen. "En vez de establecer un reconocimiento a sus equivocaciones, suelen insistir planteando más madera. Una nueva reforma laboral, una moderación de salarios, etc", afirma Cándido Méndez. 

Recetario defendido en público, pero del que según Ignacio Fernández Toxo se dura en privado. "Hasta Rehn reconoce en privado que el ajuste salarial ha ido demasiado lejos", afirma el secretaro general de CCOO.

Y tan lejos ha debido ir que ya hasta desde el bando empresarial se empieza a renegar del dogma. "Lo que hay que conseguir no es cuál es el nivel del salario, lo que hay que hacer es saber producir muy bien", expresa Juan Roig, presidente de Mercadona. "Hacer lo máximo posible con el menor coste posible tratando muy bien al consumidor".

Hasta los expertos le recuerdan a la troika que sus particulares inyecciones, no nos están sanando. "La moderación salarial, la contención del gasto y la presión fiscal nos hunden", reflexionaba José carlos Díez, economista de ICADE.

Salarios al margen, cuando llegue la reforma fiscal, sabremos si Moncloa se pliega ante Bruselas.