Para la marea blanca sí se pudo pero siquen luchando todavía, por eso salen a la calle a manifestarse. "El que no privatizaran los seis hospitales y los centros de salud, es un triunfo o que no hicieran un geriátrico del Hospital de la Princesa es un triunfo que se ha conseguido. Pero la amenaza sigue siendo grande" dice una mujer en la manifestación.

Porque los sanitarios denuncian la derivación de pacientes a centros privados. Una privatización encubierta, dicen, por eso, la marea blanca sale de nuevo a la calle más fuerte que nunca. "Tenemos que seguir defendiendo nuestra sanidad pública, que no se desmantele, que no se privatice" dice un hombre en la manifestación. Ellos lo saben bien. Los trabajadores del centro de transfusiones no cesan en su batalla."Ya se ha hecho la primera fase de privatización y queremos que reviertan ese convenio absurdo que han hecho" opina una manifestante.

Tampoco ellas, las trabajadoras de la lavandería. Dicen que son el ejemplo de cómo la privatización empeora los servicios. Hay mucho por lo que pelear. Seguirán saliendo a la calle para que los políticos escuchen sus protestas.