Ada Colau no ha querido hacer comentarios sobre la paralización de licencias turísticas y desde el Ayuntamiento recuerdan que reducir la presión del turismo era una de sus promesas electorales. Argumentan que el elevado número de visitantes ya ha generado molestias en varios barrios de la ciudad.
Hace 10 años, Barcelona tenía 268 hoteles. Hoy, tiene un centenar más. Así que en una década el número de hoteles ha aumentado un 39%, a pesar de la crisis. A estos podrían sumarse 30 nuevos hoteles paralizados ahora por la moratoria de Ada Colau. Entre ellos, los previstos en la torre Agbar, en la antigua fábrica de Henkel o en el edificio del Deutsche Bank. Grandes proyectos que, según la patronal hotelera, generarían entre 1.000 y 1.500 empleos cada año sin contar los derivados de la propia edificación de los hoteles.
"Implica la paralización en cuanto la contratación de mano de obra en construcción y hostelería”, afirma Ramón Serrat, profesor y consultor de la CETT-UB. Por eso desde la oposición piden a la alcaldesa que tome la decisión cuanto antes. “La moratoria es una ‘no decisión’ por tanto decida usted rápido porque nos jugamos mucho”, denuncia Carme Chacon, PSC. Por su parte, el gremio hotelero culpa de la elevada densidad turística a los apartamentos que operan sin licencia y pide a Colau que aproveche la moratoria para poner coto a este tipo de alojamientos.
DE 268 A 373 HOTELES EN LA ÚLTIMA DÉCADA