Después de que dos jugadores del Tenerife, Alberto Jiménez y Javi Alonso, fueran pillados en un club de alterne, el equipo no ha tardado en reaccionar.
El problema no fue únicamente que fueran pillados, sino que fue una redada donde se descubrió que ambos jugadores estaban haciendo caso omiso a las restricciones de la pandemia, por lo que el club abrió "un expediente de carácter interno, a fin de esclarecer los hechos y posteriormente depurar las consiguientes responsabilidades".
Además, mostró desaprobación con la actitud de ambos jugadores en un comunicado: "El club lamenta profundamente este tipo de comportamientos que resultan inaceptables desde todo punto de vista, y más aún en la coyuntura social y sanitaria actual".
Juan Carlos Cordero, director deportivo, ha explicado en rueda de prensa que ambos jugadores ya han sido suspendidos de empleo y les han abierto un expediente. Sin embargo, también ha intentado defenderlos ya que pidieron disculpas. "Alberto y Javi Alonso están suspendidos. Han pedido disculpas, saben que se equivocaron. Mi opinión es que no hay que crucificarlos. Se ha abierto un expediente porque esto no se puede dejar pasar, han puesto en peligro al club".
El Tenerife ha denunciado que su actitud puso en peligro no solo a toda la plantilla del equipo, sino que también lo hicieron con toda la Segunda División.