El entrenador del Atlético de Madrid, el argentino Diego Simeone, aseguró tras el empate de su equipo contra el Barcelona (1-1) que se va con la sensación de que el equipo está "bien" y añadió que "la pena" fue que les faltó concretar un contragolpe en la segunda mitad.

"Maravilloso, una noche más de fútbol brillante, un buen partido, cada uno de los equipos con sus características, un Messi impresionante, que no se cansó tanto en el viaje como muchos esperaban. Y un Atlético que compitió como todos los partidos importantes, y nos vamos la sensación de que estamos bien y queremos competir así en adelante", explicó Simeone en rueda de prensa.

Preguntado por si piensa que al equipo se le escaparon dos puntos por el gol del uruguayo Luis Suárez en el minuto 82, Simeone explicó que su primera parte fue "muy buena", en la que defendieron "muy bien" y tuvieron ocasiones en las que el portero rival fue "determinante".

"En la segunda parte a partir de los primeros 15-20 minutos ellos, con la necesidad de empatar, atacaron con más claridad, con mucha más gente, y nosotros nos defendimos bastante bien, pero creo que no pudimos sacar un contraataque importante para acomodar el partido que ya habíamos encaminado en el primer tiempo", dijo.

Simeone insistió que el de la primera parte, con el 1-0 anotado por Saúl Ñíguez, era el partido que los rojiblancos se imaginaban. "El primer tiempo nos sentimos cómodos porque hicimos el partido que queríamos, tuvimos ocasiones, dos más el gol, y ellos no tuvieron tanto peligro, salvo la primera de Messi que la resuelve muy bien Filipe", dijo.

"Y en el segundo tiempo ellos con un fútbol de ataque como nos tiene acostumbrados el Barcelona, y nosotros no pudimos contraatacar. Y esa es la pena del partido, que no pudimos sacar un contragolpe para acomodarnos mejor como lo hecho en el primer tiempo", añadió.

Preguntado sobre a qué cree que se debe que no pudieran obtener ese contraataque, Simeone alabó la "virtud" de los jugadores barcelonistas, que no les dejaron aprovechar los segundos balones y el juego de espaldas de sus delanteros.

"La más clara fue la de Griezmann con Correa que se le queda atrás a Correa", comentó. Para el técnico argentino el Atlético no pecó de falta de ambición en la segunda mitad. "Jugamos el primer tiempo igual, la diferencia entre el primero y el segundo es que pisamos mucho más el área, fuimos mucho más lúcidos para encontrar el segundo pase, y en el segundo tiempo no pudimos encontrar esa jugada que te acerca a ese espacio que tienes para adelante", argumentó.

Simeone elogió a Saúl Ñíguez, del que dijo que "sigue creciendo" y es "importantísimo para el presente y el futuro", y desveló que el centrocampista internacional estuvo trabajando en lo físico por la mañana antes del partido. "Estuvo en el gimnasio solo para estar bien para la noche, está cada vez más profesional, más hombre, y todo eso ojalá que lo haga seguir creciendo y dándole cosas importantes al club", aseguró.

En cuanto a la actuación del delantero francés Antoine Griezmann, que esta noche no marcó, a diferencia de los tres partidos anteriores en el Wanda Metropolitano, Simeone dijo que fue "el mejor partido" del punta galo en el estadio. "Tuvo dos ocasiones en el primer tiempo, que se las sacó el portero, tuvo el pase del contragolpe, aguanto de espaldas, trabajó... Hizo un partido muy completo, de los mejores que ha jugado en el Wanda", finalizó el entrenador argentino del Atlético de Madrid.