El pasado 5 de junio uno de los mejores futbolistas del siglo XXI, Zlatan Ibrahimovic, anunciaba su retirada a los 41 años. El jugador sueco decidió colgar las botas después de haber pasado gran parte de los últimos años sometido por las lesiones.

Tres semanas después, Ibra ha concedido una entrevista en la 'Gazzetta dello Sport' en la que ha hablado sobre sus sensaciones en el retiro: "Estoy sorprendentemente tranquilo y en paz. No lo imaginaba... Me sorprende, porque pensé que estaría estresado, pero no ha sido así y eso es genial".

Es tal la normalidad con la que ha aceptado el momento de colgar las botas que ha llegado a bromear con su vuelta: "El Milan sigue en mi corazón, lo que he pasado con este club es algo que siempre llevaré conmigo. Veremos qué pasa, solo han pasado tres semanas. Podría regresar como jugador, nunca se sabe. En un mes podría estar en la pretemporada".

'Ibra' se despidió de la afición 'rossoneri' hace escasas semanas en un emotivo acto en el que el escandinavo acabó entre lágrimas. Pasará al recuerdo por sus declaraciones y su soberbia, pero sobre todo, por la calidad de un delantero total, capaz de compenetrar una imponente envergadura con destellos de filigranas imposibles.