Mehran Samak, un joven iraní de 27 años, murió después de que las fuerzas de seguridad de Irán le dispararan en la cabeza. El motivo fue por celebrar la eliminación deIrán del Mundial de Qatar, después de que sus selección perdiera por 0-1 frente a Estados Unidos, según informa la ONG 'Iran Human Rights'.

"Su nombre era Mehran Samak, le dispararon en la cabeza las fuerzas del Estado al salir a festejar la derrota en la Copa del Mundo en Bandar Anzali la pasada noche, como muchos por todo el país. Solo tenía 27 años", dice en un twit la ONG.

La situación es tal que incluso las autoridades forenses no han devuelto el cuerpo a la familia. La situación en el país asiático es crítica en los últimos meses y se estima que las fuerzas de seguridad iraníes han matado a 448 personas, entre ellos, 60 niños y 29 mujeres.

En su funeral en la capital iraní, Teherán, los asistentes comenzaron a cantar la frase: "Muerte al dictador".