Pau Gasol ha sido cortado por su equipo, los Portland Trail Blazers. El español tenía una cláusula en su contrato por la cual, si surgían problemas con su lesión, la franquicia de Oregon podía cortar ese contrato, haciendo hueco para fichar a otro jugador.

El propio Gasol explica en un mensaje en sus redes sociales que no se desvincula de los Blazers, con quienes está buscando un nuevo rol con el que involucrarse con el equipo. Un rol que, según Adrian Wojnaroski, no sería muy distinto al que se le pudo ver en un partido de pretemporada con su nuevo equipo, con el que no ha podido disputar ningún partido.

La culpable de esta situación es una lesión en el pie izquierdo que no acaba de curarse. Gasol explica que el plazo de recuperación que manejaba era de seis a ocho meses, un periodo que se ha alargado, llevando a este cese de contrato con los Blazers.

¿Y ahora qué?

Lo cierto es que Pau Gasol es técnicamente un agente libre, pero no se ha desligado de los Blazers, por lo que sus opciones de marcharse a otro equipo de la NBA antes de febrero, mes en el que se cierra el mercado de agentes libres, se antoja reducida.

Si quisiese jugar en otro equipo de cara a su preparación para los Juegos Olímpicos, la opción de Europa quedaría abierta, pero parece una opción bastante lejana ya Gasol se ve dispuesto a seguir su carrera en la NBA.

Pau Gasol, en su estreno con los Bucks

Porque ese es su objetivo, los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. A sus 39 años, Pau Gasol quiere estar en los que sería su última cita olímpica, donde una medalla sería el cierre perfecto a una carrera que ya es de leyenda.

Su excompañero y MVP de la NBA Giannis Antetokounmpo le ha deseado una pronta recuperación a su "hermano mayor", sugiriéndole que prepare su discurso para cuando sea elegido para entrar en el Hall of Fame de la NBA. Hasta el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, ha querido mandarle un mensaje de ánimo.

Lo cierto es que, pese a los crecientes rumores de retirada, Pau Gasol tiene todavía baloncesto que dar a los aficionados, con grandes retos por delante. Aplicando el partido a partido, primero le toca curarse de su lesión y, después, prepararse para los que serían sus últimos Juegos Olímpicos.