Hace casi un año la voz de Dolores O'Riordan nos dejaba, pero ahora suena de nuevo en una canción que nunca habíamos escuchado. Se trata de un nuevo single de The Cranberries, enmarcado en 'In the End', el disco póstumo de la banda irlandesa.

Es un consuelo para los fans y una carta de despedida para el grupo, aunque a veces el álbum póstumo se convierte en una salida a lo grande. Algo que debió pensar David Bowie, cuando dos días antes de su muerte lanzó 'Blackstar', un adiós que acabó convirtiéndose en su primer álbum en llegar a la primera posición de la lista Billboard.

Porque el fallecimiento del artista suele disparar las ventas de discos y por eso hay quién no pierde oportunidad para sacar material inédito. Tres millones de copias en tan solo un mes fueron las cifras de venta del 'This is it' de Michael Jackson. El cantante, después de muerto, ha publicado ya otros dos discos nuevos.

Pero el que más álbumes póstumos tiene es Jimmy Hendrix, que ha publicado 12, entre los que hay algunos que no están a la altura de Hendrix y una joyita: 'People, Hell and angels'. Hendrix se fue pronto, pero dejó mucho grabado. Algo similar ocurrió con Janis Joplin. La discográfica Columbia publicó tan solo tres meses después de su muerte 'Pearl'.

Varias de las canciones más famosas de Nirvana se incluyen en el 'Unplugged In New York' y los críticos incluso vieron en éste álbum un nuevo sonido distinto al anterior. Una lástima que se publicase siete meses después del suicidio de Kurt Cobain.