Comienza la nueva edición de la 'Madrid Fashion Week', un espectáculo en el que los protagonistas no son sólo los diseños que se llevarán el próximo verano, sino también la puesta en escena.

Un buen escenario puede ser la clave para no olvidar un desfile y por ello, cada vez se cuidan más y se preparan durante meses.

Para los hermanos Muñoz, diseñadores de la marca Ailanto, el montaje de la escenografía de su desfile es como dirigir una película de cine o una obra de teatro. Su pasarela tridimensional, formada por 280 piezas de colores, la comenzaron a diseñar hace meses.

No son los únicos que apuestan por la escenografía. El equipo de Ana Locking monta un autentico taller para conseguir convertir el escenario en un templo minimalista.

La escenografía cobra cada vez más importancia, especialmente a nivel internacional. Tommy Hilfiguer, por ejemplo, impresionó al público recreando una playa con dunas de arena real en mitad de la pasarela.

La puesta en escena de Louis Vuitton en la colección primavera/verano 2012 en la Semana de la Moda de París, fue un enorme carrusel que representaba la primavera en los jardines de la Tullerías.

El año siguiente, presentó los diseños de la primavera-verano 2013 con un espectacular desfile en el museo del Louvre. Marc Jacobs, diseñador de la firma, hizo instalar unas escaleras mecánicas en uno de los patios del museo.