En el último año se ha reducido la inversión en investigación un 14%, se han reducido drásticamente las becas y muchos doctorandos llevan meses sin cobrar. Sin ciencia, el mundo se para, aseguran estos jóvenes, que han protestado bajo el lema: ''Sin ciencia no hay futuro''.

Si continúan los recortes, ''nos quedaremos estancados en el pasado'', asegura uno de los jóvenes investigadores que ha participado en la protesta. Además, ''perderemos el nivel alcanzado gracias a los avances'', ha añadido.

La llamada 'fuga de cerebros' ya es un hecho, comenta otro de los manifestantes, que no duda de que, de llevarse a cabo investigaciones paralizadas por los recortes, ''saldríamos de la crisis''.