Un equipo científico internacional ha confirmado el descubrimiento de cinco exoplanetas en un mismo sistema planetario, dos de ellos similares a Mercurio. Un hallazgo que da pistas a los científicos sobre cómo se forman estos inusuales planetas de muy alta densidad.
El estudio, publicado este martes en 'Astronomy & Astrophysics', lo ha liderado el Instituto de Astrofísica do Espaço de Portugal (IA) y en él participa el Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), que detalla en un comunicadoque el sistema planetario encontrado lo conforman tres supertierras y dos supermercurios alrededor de la estrella fría HD 23472.
La líder del estudio, la investigadora Susana Barros, ha explicado que querían observarlo para caracterizar la composición de pequeños planetas y estudiar si la existencia o no de atmósfera podría estar relacionada con la evaporación de sus capas externas por la irradiación de la estrella.
Sin embargo, "sorprendentemente", descubrieron que este sistema planetario está compuesto por "tres supertierras con una atmósfera importante, y por dos supermercurios, que son los planetas más cercanos a la estrella".
Los cinco planetas del sistema, tres de ellos con masas inferiores a la Tierra, se encuentran entre los exoplanetas más ligeros cuyas masas se han medido con el método de la velocidad radial. Una técnica que detecta pequeñas variaciones en la velocidad de la estrella en la línea de visión por el movimiento que un planeta en órbita induce sobre ella.
El descubrimiento, según detalla el IAC, ha sido posible gracias a la elevada precisión del espectrógrafo ESPRESSO, instalado en el Very Large Telescope del Observatorio Europeo Austral en Chile.
Los misterios de Mercurio
Pero, ¿qué son exactamente las supertierras y los supermercurios? Según detalla el IAC, son análogos de mayor masa de la de nuestro planeta y Mercurio, respectivamente, según su composición. Se diferencian en que los supermercurios tienen un mayor contenido de hierro, especialmente en su núcleo: estos últimos son un tipo de exoplaneta muy excepcional, hasta el punto de que solo se conocen ocho, incluyendo los dos que se acaban de descubrir ahora.
Mercurio es uno de los planetas más densos de nuestro Sistema Solar, pero se desconoce por qué tiene un núcleo relativamente mayor y más masivo que el de la Tierra y los demás planetas que lo componen. Según señala el IAC, existen varias teorías al respecto. La más generalizada sostiene que un cuerpo de elevadas dimensiones impactó contra el planeta y eliminó la mayor parte de su manto original, aunque otra hipótesis lo atribuye a su alta temperatura: puesto que Mercurio es el planeta más caliente, se habría evaporado parte de su manto.
Así, el descubrimiento de otros planetas densos parecidos a Mercurio alrededor de otras estrellas es clave para comprender la formación de este tipo de planetas. Por eso es tan relevante para los científicos el hallazgo de no uno, sino dos supermercurios en un mismo sistema planetario, ya que ayuda a entender cómo se formaron esos planetas, según ha indicado Alejandro Suárez, investigador del IAC y coautor del citado estudio. "La posibilidad de que un gran impacto cree un supermercurio es muy remota, por lo que dos grandes impactos en el mismo sistema parece improbable", precisa.
Objetivo: encontrar otra Tierra
Por su parte, el también investigador del IAC y coautor del estudio Jonay González ha indicado que para entender cómo se han formado estos dos supermercurios habrá que seguir caracterizando la composición de estos planetas. A tal efecto, ha apuntado, serán claves el futuro Extremely Large Telescope (ELT) y su espectrógrafo de alta resolución de primera generación, ANDES, que proporcionarán la sensibilidad y la precisión necesarias para sondear la composición de su superficie y su posible atmósfera.
Para el equipo que ha logrado este descubrimiento, sin embargo, es solo el primer paso hacia su objetivo final: encontrar otra Tierra. La investigadora Barros apunta que "la existencia de una atmósfera nos permitiría conocer la formación y evolución del sistema planetario y también tiene implicaciones sobre la habitabilidad de los planetas", por lo que les gustaría ampliar este tipo de estudios a "planetas de mayor periodo que tengan temperaturas más favorables".
Publicado en la revista 'Nature'
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