SUV vs compactos: ¿en qué se nos va el dinero realmente?

Factores como el consumo, el diverso y amplio equipamiento y unos precios que financiados pueden promediar –entre ambos modelos– los 20.000 euros, colocan a los Peugeot 208 y Peugeot 2008 entre los más elegidos de España. El urbano es hoy el quinto modelo más vendido, mientras que el que compite en el mercado de los B-SUV se colocan en el 12° lugar del ranking nacional. Pero no son todas buenas para estos populares coches y, si fuesen mejores en otros aspectos claves, serían aun más considerados.

Por lo que ofrecen en eficiencia, acabados y opciones de motorización, sus valores de mercado son atractivos, pero si ponemos el foco en las carencias, sus precios pasan de atractivos a lógicos. El 208 y el 2008 son coches que terminan siendo accesibles y hay razones que lo explican. Más allá de lo bueno, ¿qué otros aspectos estamos pagando que no valen demasiado la pena? Con cuatro y 4,3 metros respectivamente, ambos se encuadran en el segmento B, pero sus dimensiones exteriores no necesariamente tendrían que significar una condena.

Un coche puede ser urbano y, al mismo tiempo, versátil y astuto en lo que optimización de espacios se refiere. No es el caso de estos modelos franceses. Los volúmenes de sus maleteros no están tan mal, son intermedios. Hay rivales que ofrecen mejores cifras, pero podríamos considerar que los 352 litros del 208 y los 434 litros del 2008 –en ambos casos, la capacidad más básica, que finaliza en la bandeja que cubre el equipaje a la altura de los respaldos traseros– son tenidos en cuenta al momento de la compra.

Al interior de los Peugeot 208 y 2008, dos modelos que podrías mejorar es un apartado clave

Lo que vemos en la fila trasera es lo que más dejan que desear. Sobre el espacio interior, una diferencia un tanto ínfima de distancia entre ejes –de siete centímetros– nos invita a preguntar si un 2008 vale mucho más la pena que un 208. La respuesta variará según las prioridades. Por ejemplo, y siempre pensando en las tres plazas ocupadas, ambos registran 1,31 metros de anchura a la altura de los hombros y el 2008 agrega solo dos centímetros para las caderas. Esto nos da la pauta de que ninguno de los dos es la mejor opción para que viajen tres personas adultas de manera cómoda, sobre todo si se trata de viajes de media o larga distancia.

El 208 tampoco es lo más recomendable para pasajeros traseros adultos en lo que respecta a alturas, ya que, con 85,7 centímetros entre los asientos y el techo, se queda corto. El 2008 agrega tres centímetros y medio, por lo que resulta mejor en ese aspecto. Con sus leves diferencias de dimensiones interiores –pero sustanciales en determinados casos– ambos se presentan como vehículos para familias con niños si la idea es exprimirle a sus plazas traseras una comodidad que no es de la mejor en sus segmentos.

Ahora bien, si a ello le agregamos el factor de la seguridad, ambos fueron calificados con cuatro estrellas por la Euro NCAP y presentan prácticamente el mismo equipamiento de serie, que no está mal y va aumentando según la versión –seis airbags, control de estabilidad, alerta de cambio de carril, alarma de colisión (encendido de luces de asistencia de frenado) y encendido automático de luces de emergencia, entre otras funciones de serie–, pero un coche más grande siempre será más seguro ante impactos y, por dos puntos, el organismo considera mejor al B-SUV en lo que respecta a niños.

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