Cada año, la ONCE celebra un sorteo extraordinario especial aprovechando las fechas navideñas. Siempre, el 1 de enero, realiza su sorteo extra del denominado Cupón de Navidad, que tiene, entre otros, un premio principal de 400.000 euros, exactamente la misma cuantía que el Gordo de la Lotería de Navidad. En la edición de 2022, una de las ganadoras del premio principal del sorteo fue Sandra Tuccelli, pero a día de hoy sigue sin ver ni un euro de los 400.000 euros que le tocaron entonces.

¿Cuál es la razón? La ley, dicen.

Según explican en 'ABC', el marido de Tuccelli está incluido en el sistema de autoexclusión para personas con ludopatía, lo que le impide participar en cualquier juego de carácter reservado (lotería), tanto online como presencial, "pudiendo ser efectivamente aplicada dicha prohibición en el momento del pago de premios". La afectada ha explicado al citado diario que el premio lo ganó gracias a un cupón que le regaló su madre y que intentó cobrar su pareja.

Ahora, un año más tarde, siguen sin noticias de su premio. Desde la ONCE asegura, siempre según 'ABC', que el registro bloquea directamente el cobro siempre que el que lo demande esté inscrito en este sistema, como es el caso, aunque aseguran que para cobrarlo tendrán que tirar de la Justicia porque, sostienen, la ley no les permite cobrar.

Tuccelli, camarera en un bar de Valencia, asegura que todavía "se levanta con pesadillas" y que no hay día que no se acuerde del cupón que la ONCE tendría que haberle pagado. Según el reglamento interno de la ONCE, si un premio resulta imposible de pagar a su ganador, el dinero se destinará a fines sociales propios de la organización.