El jueves 10 de junio compartía un vídeo en el que Yolanda Díaz, Irene Montero, María Jesús Montero, Ana Pastor, Inés Arrimadas y Begoña Villacís se comprometían públicamente conmigo, con todas las Malasmadres, con nuestra Asociación 'Yo no renuncio' por la conciliación. Ellas se han unido a la carrera que celebraremos, de manera virtual, el próximo 27 de junio. Una acción para reivindicar, para visibilizar la necesidad de un cambio social y para, como no, un año más dar pasos hacia nuestro objetivo personal y colectivo de un Pacto de Estado por la conciliación.

Después de seis años de lucha, creo que tenemos claro que el cambio solo se producirá si todas y todos remamos en la misma dirección. Si las instituciones se comprometen, si las dirigentes políticas representan nuestros derechos hacia una sociedad más justa e igualitaria, si las empresas dan pasos hacia modelos laborales más flexibles y paritarios y si la sociedad se conciencia de verdad. Cada mujer, cada hombre, cada persona, madre, padre o no tenemos una responsabilidad con el cambio, tenemos que ser activistas y hacer, no tanto decir, y actuar, no tanto criticar.

 

Por eso cuando después de este vídeo que me enorgullece, que me da alas y esperanza, me cabrea, me entristece recibir mensajes como este:

"Sinceramente creo que las políticas en esto sobran. Se apuntan las primeras a la foto, pero luego a la hora de cambiar las cosas de verdad no se mojan. Mal. Mal. Mal".

Porque el cambio solo vendrá si nos comprometemos más allá de las ideologías por la transformación de un sistema que falla.

Pero no os preocupéis, que pronto me limpio las lágrimas y esa rabia la convierto en acción. Porque eso es lo que tenemos que hacer, actuar por y para cambiar las cosas y entender, informarnos y comprometernos.

¿Cómo van a sobrar las políticas en este vídeo? Primero de todo, más mujeres políticas tomando decisiones, liderando y gobernando. Segundo, la importancia de que se comprometan, de que hagan nuestra causa suya, de que hagan propuestas que cambien las leyes, que den pasos hacia una corresponsabilidad real y que permitan que trabajemos por una sociedad con futuro.

Así que desde aquí GRACIAS Ana, Inés, Begoña, Yolanda, María Jesús e Irene por comprometeros, por decirlo públicamente, ahora toca trabajar y dar pasos. Pero confío que así será. Y ya sabéis que estaré aquí para recordároslo.

No renunciemos.

Juntas somos más fuertes.