Cuidar la alimentación es una recomendación que médicos y expertos han venido repitiendo durante muchos años. Sin embarco, cada vez es más frecuente ver cómo la gente empieza a preocuparse por llevar dietas saludables y mejorar sus hábitos alimenticios. Uno de los métodos que se ha estado utilizando para saber si un producto es saludable o no es el etiquetado Nutri-Score, una clasificaciónque llevan muchos de los productos en los supermercados. No obstante, Italia ha tomado la decisión de echar por tierra este sistema.

Nutri-Score es un sistema de etiquetado nutricional que sirve de ayuda para, supuestamente, facilitar a los compradores una información nutricional más clara, es decir, busca ayudar a los consumidores a optar por la opción más saludable. Facilita de esta manera la comprensión de la información nutricional del alimento procesado, favoreciendo la toma de decisiones más saludables para la población.

Consiste en un logo o gráfico basado en una escala de 5 colores, de verde oscuro a naranja oscuro, asociados a cinco letras que van desde la ‘A’ hasta la ‘E’. Las letras reflejan de manera gradual, de mayor (letra A y color verde) a menor (letra E y color naranja fuerte), la calidad nutricional de los alimentos.

Toda la información sobre los componentes favorables y desfavorables que contienen los alimentos está disponible en el etiquetado nutricional, que se encuentra en la parte posterior del envase.

Italia tumba las etiquetas Nutri-Score

La razón por la que la Autoridad Italiana de la Competencia y el Mercado (AGCM) ha decidido prohibir estas etiquetas se basa en la premisa de que la etiqueta Nutri-Score podría estar llevando a los consumidores a cometer errores a la hora de elegir alimentos debido a la clasificación arbitraria que ofrece dicho etiquetado ya que, según la organización, “no incentiva al consumidor a hacer una evaluación adecuada para seguir una dieta que satisfaga la ingesta diaria de nutrientes" según recoge la prensa italiana.

Añaden, además, que este tipo de etiquetado no tiene en cuenta las necesidades y el perfil nutricional del consumidor. Desde la AGCM han apuntado que “mientras no exista una legislación europea al respecto, no se puede preferir un método de etiquetado sobre otro. Por lo tanto, quienes deseen utilizar este tipo de etiqueta deberán especificar que el sistema de semáforos se desarrolla sobre la base de un algoritmo y de evaluaciones científicas que no son universalmente reconocidas ni compartidas”.

Ha sido Carrefour Italia el primer supermercado que ha decidido no aplicar a partir de ahora el marcado Nutri-Score en productos de marca propia. Según los responsables de la filial italiana de la compañía francesa, "se aplicará a todos los productos encargados por Carrefour Italia a sus proveedores y comercializados en Italia o en el extranjero". "En productos DOP (Denominación de Origen Protegida) o IGP (Indicación Geográfica Protegida), en productos de la tradición gastronómica italiana, entre ellos, aceite de oliva, y en productos bajo la marca Terre d'Italia".

Por otro lado, Massimiliano Giansanti, presidente de Confagricultura, ha querido dejar clara su postura: "Las decisiones de la AGCM sobre Nutri-Score confirman lo engañoso del sistema francés y su conflicto con el Código del Consumidor". En este sentido, Giansanti ha asegurado que la Autoridad opina lo mismo que la institución que preside con respecto a lo que consideran "engañoso": "Este sistema de etiquetado puede confundir al consumidor y no se basa en evidencia científica. Por lo tanto, es una herramienta engañosa. Este fallo debe hacernos reflexionar sobre la adopción de Nutri-Score en Italia y en Europa".

La posición de España sobre Nutri-Score

Nutri-Score fue diseñado por un grupo de científicos franceses independientes. El cálculo del etiquetado está basado en el sistema de perfiles nutricionales de la agencia de seguridad alimentaria del Reino Unido (Food Standards Agency), según se puede leer en la página web de la OCU.

En su página web oficial, la OCU explica que apoya el uso de Nutri-Score, “en espera de que se generalice su uso y se adopte este sistema de etiquetado nutricional frontal en toda la Unión Europea”.

No obstante, la Organización de Consumidores es consciente de que este método es criticado por no tener en cuenta aspectos que tienen importancia tanto en la calidad del producto como en su impacto sobre la salud del consumidor; aun así, sí se muestran a favor de que se utilice este tipo de etiquetado.

Según la agencia española Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan), Nutri-Score permite comparar la calidad nutricional de los alimentos, pero siempre que estas comparaciones sean pertinentes y útiles para los consumidores a la hora de orientar sus decisiones de compra y consumo. Estos son los alimentos que, según la agencia, sí se deberían poder comparar gracias al etiquetado Nutri-Score:

  • Alimentos que pertenecen a la misma categoría, por ejemplo, los cereales de desayuno, o los copos de avena. Diferentes tipos de galletas, de chocolate, de avena, integrales...
  • Un mismo tipo de alimento propuesto por marcas distintas, es decir, comparar un mismo tipo de cereales con otros de otra marca distinta
  • Alimentos pertenecientes a familias diferentes, pero a condición de que pueden sustituirse entre sí, por consumirse en un mismo momento del día

Lo que busca este tipo de etiquetado es que los consumidores sean capaces de comparar los productos para encontrar así un equilibrio saludable. No obstante, para la Asean esta comparación no tiene valor si no son alimentos que el consumidor no compra en la vida real, es decir, en el momento de hacer la compra.

Además, desde Aesan recalcan que Nutri-Score no está ideado para recomendar el consumo de alimentos, ya que para eso están las recomendaciones dietéticas y guías nutricionales de las autoridades sanitarias y organizaciones científicas.

¿Qué opina la OMS de Nutri-Score?

Desde el punto de vista de la Organización Mundial de la Salud, el etiquetado nutricional frontal sirve para promover dietas saludables entre los consumidores ya que al facilita la interpretación de la información nutricional que se encuentra en el etiquetado. Esto permite, por ejemplo, que los consumidores tomen elecciones de alimentos más saludables.

Según la OMS, estos son los principios que debería cumplir un sistema de etiquetado frontal como Nutri- Score:

  • Tiene que estar alineado con las políticas nacionales de salud pública y nutrición y las regulaciones alimentarias
  • Debe desarrollarse un sistema único para mejorar su impacto que sea transparente y de fácil acceso
  • Las declaraciones obligatorias de nutrientes en los envases de alimentos son un requisito indispensable
  • Debe haber un proceso de seguimiento y revisión para llevar a cabo las mejoras necesarias