Un avión no tripulado del Ministerio de Defensa, que se ha utilizado en Afganistán, sobrevuela ahora la comarca leonesa del El Bierzo en busca de incendios. Desde una cabina se controla un dron que hasta el 15 de septiembre vigilará de día y de noche grabando todo lo que encuentre. "Son misiones de inteligencia, vigilancia y reconocimiento, aportar información en forma de imágenes en tiempo real para alertar a las unidades que están sobre el terreno", declara Jesús Ángel del Barrio, jefe de grupo de Obtención por Sistemas Aéreos.

Durante cinco horas diarias vigila una de las zonas más castigadas por los incendios. Allí, en El Bierzo, el 70% de los fuegos son intencionados.

Con el aumento de temperaturas y la escasez de lluvias las medidas de prevención son esenciales y en Galicia también lo hacen desde el aire. Allí, pequeños drones militares colaboran en las labores de vigilancia.

"El avión va automáticamente a donde apunto con la cámara, con lo que me olvido por completo del manejo de la nave", declara uno de los militares.

Naves que muchas veces llegan donde las patrullas terrestres no pueden. "Creo que el efecto disuasorio es bastante efectivo. No sólo para evitar quemas, rastrojos o cualquier provocación de un incendio, también para disminuir delitos en la zona", sostiene Manuel Martín, capitán de artillería.

En total, desde enero, 56.000 hectáreas han sido calcinadas.