Europa
La Semana Santa de nuestros vecinos europeos
La fiesta de la primavera recorre Europa
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Semana Santa llega junto con la primavera a Europa, y muchos, creyentes o no, consideran que es un símbolo de la nueva vida. La fiesta de la primavera se celebra desde hace siglos, incluso antes de la llegada del cristianismo. Es más, se cree que la palabra en inglés “Easter”, o Pascua Florida, se debe a la diosa pagana germánica que representa la primavera y la fertilidad, y sus símbolos son la liebre y el huevo. De ahí los conejos y los huevos de Pascua. Cada país lo celebra a su manera. Toma nota Rumanía. Los rumanos tienen la costumbre de celebrar la Pascua en familia. La comida tradicional de Semana Santa se compone de 4 o 5 platos e incluye una sopa agria llamada “ciorba”, ensaladas, encurtidos, cordero asado, una empanada redonda rellena de hígado de cordero, perejil fresco, hinojo y cebolletas, y por último un montón de huevos pintados. La tradición más divertida es la “batalla de los huevos”. Una competición en la que participan familia y amigos. Lanzamiento de huevos cocidos al contrario y gana el huevo con la cáscara más dura. El que pierde tiene que comerse los huevos del contrario. La mañana de Pascua hay que lavarse la cara con el agua en la que se han cocido los huevos pintados de rojo junto con una moneda de plata. Y es que el huevo rojo simboliza la salud y la plata la pureza. Bulgaria. También en Bulgaria se juega al "Choque de huevos" para ver quién ha elegido el huevo más resistente. El ganador tendrá una salud de hierro y muy buena fortuna durante todo el año. Huevos decorados para luchar y ver cuál se rompe primero. Suecia. En Suecia los niños se disfrazan de brujas, påskkärringar. Se pintan la cara, llevan una escoba y llaman a las puertas de los vecinos para llenar sus bolsas de dulces y chocolates, igual que los niños estadounidenses hacen en Halloween. Los suecos decoran sus casas con ramas de abedul, sauce, y muchas veces comen una especie de buffet de muchos platos, con arenque, salmón, patatas, huevos, embutidos, etc. Alemania. La Semana Santa comienza el Jueves Santo, llamado “Grundonnerstag”. Este día la tradición manda comer sólo alimentos de color verde. El plato más común es la sopa de siete hierbas que contiene berro, dientes de león, perejil, cebollino, hojas de puerro, acedera y espinacas. De postre huevos de chocolate y Osterlamm, un pastel de cordero con azúcar glas espolvoreado por encima. Los alemanes decoran sus árboles con huevos de colores. Estos árboles de Pascua, o “Osterstrauch” adornan las calles y los jardines y anuncian la llegada de la primavera. Finlandia. Los finlandeses creen que los espíritus malignos pasean libres el sábado antes de Semana Santa, por eso encienden hogueras y se disfrazan de brujas. El domingo, los niños buscan los huevos de chocolate que sus padres han escondido en los jardines o las casas. Otra tradición es comer dulces Mämmi, un postre que tarda horas y horas en hacerse y debe ser enfriado durante tres días antes de que se puedea servir con leche o crema y azúcar. Dicen que la espera merece la pena. Italia. En Florencia, el Domingo de Pascua celebran lo que se llama el Scoppio del carro. Una procesión en la que utilizan una carreta, tirada por bueyes, que tiene montada una caja de unos 10 metros de altura llena de fuegos artificiales. Se detienen frente a la Catedral y le conectan una mecha que llega hasta el Altar Mayor. Una persona designada, utilizando unas fragmentos de piedras provenientes del Santo Sepulcro en Jerusalén, enciende una pequeña antorcha que es llevada dentro de la iglesia y entregada al Cardenal, quien la pega a la mecha y el fuego se desplaza hasta la carreta, activando los fuegos artificiales. Gran Bretaña. Durante Easter se hace una limpieza general en las casas, el denominado, Spring Cleaning, que prepara la casa para recibir la bendición del párroco y para comenzar una nueva etapa con la primavera. En el Good Friday, Viernes Santo, los anglosajones se preparan para el gran día de la resurrección de cristo, la preparación incluye comprar nueva ropa, cortarse el pelo, hacerse la manicura, etc. El Easter Sunday se suele ir a la Iglesia con la familia y tras la celebración de la Resurrección de Cristo se celebra en las casa una tradicional Easter Dinner donde se come todo lo que se ha evitado durante la Cuaresma. El Domingo de Resurreción y el Lunes Santo se suelen hacer juegos con los huevos de Pascua. Los padres esconden los huevos en el jardín y a primera hora de la mañana del domingo invitan a sus hijos pequeños a encontrarlos. La mayoría de ellos son de chocolate. Los otros huevos, los pintados, se regalan a las personas queridas. Francia. En Francia, son las campanas de Pascua, las que vuelven de Roma cargadas de chocolate para los niños, o al menos eso es lo que se sabe. Los niños buscan los huevos de Pascua en los jardines más bellos de la región Dordoña Périgord, Los Jardines de Marqueyssac y Los jardines del Manoir de Eyrignac. Aunque la tradición de las procesiones que existe en España no está tan extendida en Francia, sí que existen algunas ciudades francesas donde éstas son conocidas. En el sur de Francia, por ejemplo, en Perpignan, la ciudad del Languedoc-Roussillon, orgullosa de sus tradiciones catalanas, celebra la procesión de la Sanch, fuerte testimonio de la fe popular. También en varias localidades de Córcega se realizán procesiones como la procesión de la "Granitola" en Borgo. Dinamarca. En Semana Santa muchos hogares y tiendas se adornan de verde y amarillo, sobre todo con nuevos brotes y narcisos. El principal símbolo de la Pascua continúa siendo el huevo. Los huevos que se emplean como decoración pueden ser huevos corrientes de gallina vacíos y coloreados o huevos artificiales y distintos tipos de huevos de azúcar y chocolate. Como adorno también se utilizan pequeñas gallinas y pollitos y, cada vez más, el conejo de Pascua. Una tradición danesa es enviar cartas-adivinanza. Antes de la Pascua la gente, sobre todo los niños, escriben artísticas cartas con un verso-adivinanza. Las cartas son anónimas, pero van firmadas con tantos puntitos como letras tiene el nombre del remitente, para que el destinatario pueda adivinar quién las envía. La carta va acompañada de una campanilla blanca, considerada la primera flor del año. Polonia. El Domingo de Ramos, Niedziela Palmowa, se va a misa con las tradicionales palmas llenas de lazos y flores que se compran en las entradas de las iglesias. El Viernes Santo es un día de recogimiento, los polacos van a misa y hay colas para confesarse realmente gigantescas. Las iglesias se adornan y la gente va de iglesia en iglesia para ver la decoración y elegir cuál de ellas es la más bonita. El Sábado Santo, también se acude a la iglesia, pero esta vez, la gente lleva cestitas de mimbre con comida que el cura bendice. Los huevos son el símbolo de la vida y de hecho durante esta época es muy típico pintar los huevos cocidos “Pisanki”si tienen dibujos de conejos, campanas etc.o “Kraszanki”si son pintados con color pero sin decoración. El domingo de resurrección se toma un gran desayuno en familia y no faltan los pasteles llamados “mazurek”. En la mesa se coloca un cordero hecho de mantequilla. El lunes de pascua, “Smingus-Dyngus” o “Lany Poniedzialek”, tienen una curiosa tradición: mojar a las chicas. Se dice que si te mojan entonces significa que te vas a casar ese año o también que si a un chico le gusta una chica cuanto más la moje significa que más la quiere. Suiza. La costumbre de decorar las fuentes en la ciudad de habla francesa de Nyon no tiene más de 30 años, pero ninguno de los organizadores actuales puede recordar exactamente de dónde surgió la idea. Ahora es una atracción turística con visitas guiadas. Rougemont, en el cantón de Vaud, tiene una tradición única que se remonta a 2001: Cada año, 12 huevos enormes son decoradas de acuerdo con diferentes temas y distribuidos por la ciudad. Un tradición que ha sufrido altibajos es la del “combate con huevos”. La gente la practica en casa y se utilizan huevos decorados. Las procesiones de Jueves y Viernes Santo reviven en Mendrisio, ciudad meridional del cantón del Tesino. Estas tradiciones fueron introducidas por la Orden de los Siervos de María, quienes provenían de España y se establecieron en el Tesino en 1541. En Jueves Santo tiene lugar el Via Crucis. Se recorre el centro histórico de la ciudad medieval escenificando los diferentes pasajes del camino al monte Calvario y la posterior crucifixión. En el Viernes Santo se escenifica el entierro. La ciudad luce sus antiguos lienzos de lino blanco pintados con motivos de La Pasión y colocados como lámparas iluminadas, que adornan a derecha e izquierda el paseo de las calles del centro.
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