REPÚBLICA CHECA
Reloj Astronómico de Olomouc: ¿sabías que es uno de los pocos relojes heliocéntricos en todo el mundo?
Es el momento perfecto para conocer la historia que esconde el Reloj Astronómico de Olomouc, situado en República Checa.
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Viajamos hasta República Checa, concretamente hasta Olomouc, donde encontramos un elemento verdaderamente fascinante y que pocos conocen. Estamos hablando, cómo no, del Reloj Astronómico. Fue construido en el siglo XV y reconstruido en varias ocasiones. El aspecto que presenta en la actualidad es de 1955 y tiene como peculiaridad que se trata de uno de los pocos relojes heliocéntricos que podemos encontrar en todo el planeta.
Para comenzar, debemos saber que este Reloj Astronómico de Olomouc está situado en la fachada noroeste del Ayuntamiento, cuya alcoba arqueada es de unos 14 metros de alto. Respecto al dial inferior, debemos tener en cuenta que representa lo que llamamos “esfera terrenal”, por lo que indica minutos, horas, días, meses, años y hasta fases de la luna.
En cuanto al calendario situado bajo el reloj, debemos saber que éste indica los días de los santos checos, pero también los días señalados en el régimen comunista. Un claro ejemplo lo encontramos en los cumpleaños tanto de Gottwald como de Stalin. Si hablamos del dial superior, éste representa la esfera celestial y cuenta con un mapa no solamente de las estrellas, sino también de la tierra, el sol y los planetas. Todo ello sobre un espectacular fondo donde queda reflejado el zodiaco.
El mediodía es anunciado por nada más y nada menos que un gallo de latón, así como diversos figurines animados que pasan, durante 7 minutos, por delante de las ventanas del Reloj Astronómico. Entre esas profesiones que representan los figurines podemos encontrar un mecánico, un panadero, un minero y hasta un trabajador de fábrica, entre otros.
La fachada de este Reloj Astronómico destaca por tener un importante mosaico en el que queda reflejada la Cabalgata de Reyes, una “procesión de doncellas”, un trabajador con una llave inglesa y un farmacéutico con un “flasco”. Alrededor de este mosaico también se representan tanto los dos festivales tradicionales como las doce estaciones.
En este Reloj Astronómico encontramos 16 campanas que fueron moldeadas por P.Hilzer, aproximadamente, en el año 1898. Un dato curioso es que, según el diseño original, el carrillón tenía que reproducir nada más y nada menos que “El Internationale”. Ahora, en vez de eso, reproduce tres reconocidas canciones folklóricas de República Checa.
La primera mención del Reloj Astronómico se hace en 1519 aunque, según la tradición fue construido, aproximadamente, entre los años 1419 y 1422. Hay una leyenda que asegura que el astrónomo que realizó esta obra fue cegado con el fin de que no pudiera hacer un trabajo semejante en cualquier otro lugar del mundo. Una historia que se repite en diversos relojes astronómicos de otros puntos del planeta, como es el caso del de Praga.
Debido a las distintas reconstrucciones realizadas, se han ido añadiendo diversos figurines móviles. Desde los tres Reyes Magos y sus camellos hasta San Jorge pasando por San Wenceslao. Una curiosidad es que este Reloj Astronómico, en 1800, se paró por completo. Y así estuvo hasta 11 años hasta que, gracias a unas reparaciones provisionales, volvió a funcionar. Durante la Segunda Guerra Mundial, en mayo de 1945, este Reloj fue dañado por una granada.
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