CASTILLA Y LEÓN
El diablo visita la Fiesta del Colacho
Con colores chillones, una máscara diabólica, un látigo y unas descomunales tarrañuelas, salta sobre los niños bautizados durante el año. Es el momento álgido de unas fiestas muy especiales en Castrillo de Murcia (Burgos).
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Castrillo de Murcia celebra cada mayo una curiosa fiesta protagonizada por un personaje burlesco un tanto singular: el diablo. Un personaje cuya finalidad es la de sabotear los actos religiosos. Llamada la Fiesta del Colacho, se celebra en esa localidad burgalesa nada menos que desde el año 1621, toda una tradición de origen secular que cuenta con un gran arraigo y que además fue declarada de Interés Turístico Regional en Castilla y León.
Si no tienes plan para este próximo fin de semana, te recomendamos una escapada hasta Castrillo de Murcia para vivir en primera persona esta jornada tan especial.
El punto álgido de la celebración tiene lugar durante la procesión de Octava del Corpus, que este año será el domingo 29 de mayo. Momento en el que el travieso personaje huye del Santísimo Sacramento y va saltando sobre diferentes colchones en los que reposan los niños bautizados durante el año.
Esto es lo que se llama el Salto del Colacho, que representa el acecho diabólico sobre los pequeños. Pero tranquilos, que el religioso que preside la procesión bendice a los niños, salvándoles así de esta amenaza.
Fue la Cofradía del Santísimo Sacramento quien instauró esta curiosa celebración durante la festividad del Corpus, con un objetivo, el de que el pueblo se involucrara en la fiesta del Corpus y en la devoción al Santísimo Sacramento. El protagonista de la festividad, con mucho teatro ritual, intenta interrumpir y estropear todos los actos programados para estos días.
Así es la fiesta de El Colacho, que comienza en la localidad burgalesa de Castrillo de Murcia el 25 de mayo y que terminará el día 30 de mayo. Prepárate para vivir este día en el que ropas de colores chillones, una máscara diabólica, un látigo y unas descomunales tarrañuelas, instrumento musical formado por dos grandes valvas de madera con un sonido similar al de las castañuelas, toman las calles del pueblo. Así va caracterizado el Colacho, que hará diferentes recorridos por las estrechas y sinuosas calles y plazas de Castrillo de Murcia mientras el pobre recibe toda clase de improperios de habitantes y visitantes.
Y ojo porque hay que estar atento ya que el diabólico personaje también puede asustar, perseguir y golpear a quien le venga en gana.
A estos recorridos se les suma otro personaje importante: el Atabalero. Un personaje que con su enorme tambor, conocido como Atabal, va por las calles acompañado por diferentes cofrades vestidos con capa castellana y sombrero. Y lo hace para anunciando a todas las congregaciones en el templo para rezar las horas litúrgicas. El Colacho también intentará entorpecer este cortejo.
El momento más importante de la celebración es la procesión eucarística el domingo. Las colchas y las colgaduras engalanan las calles por las que discurre. En las plazas se colocan altares adornados y, cerca, los colchones donde reposan los niños que han sido bautizados durante el año. Y con los saltos del diablo y la bendición para salvarlos se derrota a la influencia maléfica del pueblo. En ese momento, el Colacho deja de burlarse porque ha sido vencido por el Bien y acompaña, humillado, a los cofrades en la llamada procesión cívica. Esta procesión llega hasta la era de San Juan, donde la Cofradía del Santísimo Sacramento invita a pan, vino y queso al aire libre
Si por algo destaca la provincia de Burgos es por sus grandes posibilidades para todo tipo de viajes y viajeros. Cultura, patrimonio, arquitectura, gastronomía, espacios naturales, pueblos, tradiciones y una gran diversidad que no te puedes perder. Descúbrela.
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Fiesta del Colacho
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