Tu cuerpo se usará para desbloquear tecnología

Con la llegada del iPhone 5s llega una de las funciones más interesantes integradas en un móvil, un sensor capaz de detectar tu huella dactilar para así desbloquear el terminal. No es algo nuevo: la difunta Motorola presentó en 2011 el Motorola ATRIX, un smartphone con un lector de huellas y Android que permitía desbloquear el dispositivo, aunque estaba enfocado a empresas.

Aunque hacían lo mismo, los grandes errores de Motorola fue integrarlo de una forma 'fea' a la vista y que estaba dirigido a un grupo de personas que se ven forzadas a usar esta característica porque su departamento de IT se lo dice. En cambio, Apple lo hace bonito, le da un uso viable y sencillo y lo empaqueta en uno de los mejores smartphones del mundo.

Touch ID, el sistema biométrico que usa Apple tampoco es nuevo: se lleva usando muchos años para diferentes niveles de seguridad. En muchas empresas y administraciones públicas se usan pequeños lectores de huellas para desbloquear PCs. Pero Apple ha logrado integrarlo en algo que solo se usaba como botón para volver a la pantalla principal, lo ha 'escondido' a la vista.

Aunque Apple ha hecho saber que tu huella se almacena en el procesador del terminal, jamás en la nube o inicialmente al alcance de ninguna organización o persona que la quisiese para algo, en verdad no queremos saber qué se podría hacer con ella. La seguridad es importante en un dispositivo que se ha convertido en el centro de nuestra vida digital y que llega a ser la herramienta más importante hoy por hoy.

Y sí, Touch ID lee tu huella, pero existen otros sistemas que te usan para agregar una capa extra de seguridad.

Quizá una de las más usadas es la huella dactilar, pero también se puede usar tu rostro como método de seguridad. Existen multitud de aplicaciones que reconocen las distancias entre algunos puntos visibles de tu cara para crear una llave única. Sistemas como VeriFace de Lenovo o el mismo sistema que integran los terminales Android para desbloquear con tu rostro tu móvil o tablet son un ejemplo.

Aunque esta tecnología ha mejorado bastante, en sus inicios bastaba con tener una foto del sujeto e iluminarla bien para que este tipo de sistemas se desbloquearan. Mejoras en el reconocimiento de rostros, como añadir información de profundidad, hacen que esto ya sea poco posible. Intel demostró en 2012 y 2013 mejoras en este ámbito del reconocimiento facial que mide tridimensionalmente, más allá de los espacios entre ojos o longitud de tu nariz.

Todo esto puede quedar en el pasado si se logra hacer que productos como Nymi tengan éxito. Porque aunque es cierto que en nuestro cuerpo existen peculiaridades únicas, como las ya citadas huellas, nuestra cara o incluso nuestro iris, la solución podría ser guardar nuestra seguridad en la muñeca: que la llave maestra sea nuestro pulso.

Nymi es capaz de reconocer el pulso de su dueño, ya estés en pausa con un pulso normal o con un pulso acelerado. Por solo 79 dólares te puedes hacer con una de estas pulseras que, aunque no existen muchos usos en la actualidad, están creando aplicaciones para que sea compatible.

La visión de Nymi es bastante acertada en lo que a la seguridad se refiere. Es un producto que tienes en tu cuerpo siempre, con una llave maestra completamente tuya y tan personal como solo tus latidos pueden serlo. Sus desarrolladores le han dotado de más sensores, como el de movimiento, para que con algunos gestos básicos puedes crear más llaves.

En el futuro cercano la pulsera serviría para hacer pagos al acercarla, o que tu tablet se desbloquee en el momento en el que la sujetas con la misma mano donde tienes la pulsera puesta. Son visiones simples y que logran hacer de este tipo de tecnología una candidata a sistema de seguridad personal perfecto.

Mientras tanto, a falta de hardware bien integrado que sirva para desbloquear equipos o servicios, podemos tener sistemas de desbloqueo en dos pasos en aplicaciones como Facebook, Google o Microsoft.