Manu Marlasca, jefe de Investigación de laSexta Noticias, analiza todos los detalles de la ‘Operación Candy’ que llevó a la Policía a dar con el pederasta de Ciudad Lineal.
Marlasca destaca que, en un principio, se le atribuyen a Antonio Ortiz tres hechos consumados por el mismo ‘modus operandi’ empleado para el secuestro de las menores. Una forma de actuar que “jamás había visto la Policía española”, según destaca el periodista.
También ha destacado la compleja operación que ha tenido que llevar a cabo la Policía debido a este método de secuestro. El agresor tenía mucho cuidado con sus movimientos. Secuestraba a las niñas en lugares donde no hay cámaras de seguridad.
Además, según Marlasca, "Antonio Ortiz cambiaba mucho de coche", para no ser reconocido. Narcotizaba a las menores para agredirlas, luego las lavaba para borrar posibles huellas y finalmente las devolvía.
La edad de las niñas, de entre 5 y 9 años, y su testimonio borroso de los hechos debido al fármaco que el pederasta les suministraba también dificultaban mucho la búsqueda de detalles para dar con él. Tampoco aparecía Antonio Ortiz en un principio en las bases de datos de delincuentes sexuales.
Sin embargo, "el momento clave de la investigación fue el secuestro de la niña dominicana, porque comete muchos errores", destaca Marlasca. En ese momento, no contaba con los narcóticos que utilizaba ni con la llave del piso donde consumaba sus agresiones.
Se paró en una tienda, donde fue grabado por primera vez por una cámara -"aunque la imagen era muy mala", añade-. Pero, sobre todo, la descripción que hizo la menor de los efectos personales de Ortiz cuando se encontraba en el coche de éste, describiéndolo como una persona que acudía a menudo al gimnasio, fue fundamental para dar con el agresor y detenerlo posteriormente.
Finalmente, Marlasca ha subrayado que “los delitos son tan graves que no parecen que hayan sido los primeros”. Así, “la historia demuestra que las agresiones han tenido que tener una base", como por ejemplo el consumo de pornografía infantil.