Toda buena información debe responder a cinco preguntas: Quién, Qué, Cuándo, Dónde, Por qué. A lo que yo añadiría: ser cierta y que la tesis esté clara. Así que hagámoslo bien. Primero, la tesis: ¿es el caso Ábalos el ejemplo perfecto de trama de corrupción? Alfonso Pérez Medina, responsable de Tribunales de laSexta, lo tiene claro: "Es una trama clásica de corrupción por las mordidas, por los contratos, por las adjudicaciones supuestamente amañadas, por los motes, por la forma en la que ellos se comunican, por el lenguaje en clave que utilizan...".
Los delitos
Confirmada la tesis, vamos con el qué o el cómo: los delitos. En el 'caso Ábalos' se investiga si existe una organización criminal, cohecho, tráfico de influencias, malversación de fondos públicos, delitos contra la Hacienda Pública y blanqueo de capitales. Todo presunto (que diría aquel) de momento.
Para Elena Herrera, periodista de Tribunales de eldiario.es, "todo lo que vamos conociendo nos retrotrae a los casos de corrupción de los 2000. Es un caso de corrupción que cumple con todos los tópicos de las grandes causas que hemos conocido en los últimos años. Están esos contratos públicos a cambio de mordidas, las grabaciones, los motes...".
Los motes
Los motes de los corruptos nos llevan directos a la siguiente pregunta: ¿quién?. En Lezo tenemos a 'El Conde', 'El Moro' o 'Maradona'. Otro caso reciente, el Mediador, nos deja apodos como el 'Tito Berni', 'Papá' o "el chocho volador". Aunque, quizás la palma se la lleva la Gürtel. De aquí salen 'El Bigotes', 'El Curilla', 'El Albondiguilla', 'Luis el Cabrón', 'Don Vito' o 'El Rata', 'El Bujías'...
En la Gürtel está mi favorito de todos: M. Rajoy. Imposible saber a quién se referían (guiño, guiño). Y ese es precisamente uno de los objetivos de los apodos, que no te pillen, como nos recuerda Elena Herrera, "en el caso Ábalos los motes los utilizaban para evitar ser descubiertos en caso de una investigación". SPOILER: no pinta que les vaya a salir bien porque, reconozcámoslo, no están demasiado currados.
Según el informe de la UCO "el uno" sería Pedro Sánchez, presidente del Gobierno. O sea, el 1 del Gobierno. 'El Grandullón' es Koldo, para sorpresa de nadie, un tipo enorme. Y 'El Gominas' es Víctor de Aldama, un tipo con, oh sorpresa, el pelo engominado.
Lo de llamar 'Goblins' a Ábalos está por explicar. Hay quien dice, con cierta maldad, que sería porque, en Harry Potter, los goblins (o duendes) tienen la llave de la caja. Lo cierto es que "no sabemos exactamente por qué a Ábalos lo llamaban Góblins porque no está explicado en el sumario. "Se entiende", dice Alfonso Pérez Medina, "que es por el parecido físico que tiene con estos personajes que son unos enanos de la mitología".
Un apunte más sobre los motes, porque a veces no se refieren a personas sino a otras cosas como la caja de dónde sale el dinero. En el caso de los ERE tenemos el 'Fondo de reptiles', que es como Javier Guerrero llamó a la partida de dinero que se repartía discrecionalmente. La expresión llega directa desde el siglo XIX, del canciller Otto Von Bismarck. Esta no la viste venir, ¿eh?
Las grabaciones
Las escuchas telefónicas, y ahora también los mensajes de móvil, nos llevan directos a la gran pregunta: ¿por qué? La respuesta es muy sencilla: para enriquecerse. Se ve clarísimo en el caso Naseiro, la primera gran investigación por financiación irregular al PP y que, por errores judiciales, quedó en nada.
En esas grabaciones está el mítico "estoy en política para forrarme" erróneamente atribuido a Zaplana. Él nunca lo dijo, aunque sí dijo "me tengo que hacer rico porque estoy arruinado, Boro". Acabó ganando mucho dinero... ilegal, según acaba de acreditar la audiencia de Valencia condenándolo a 10 años de cárcel.
Las grabaciones y mensajes nos han permitido saber que los corruptos son ante todo personas. Personas que sienten. Personas que se quieren. Como Camps y 'El Bigotes', dos "amiguitos del alma" que se querían, "que se querían un huevo".
Un patrón que se repite en el caso Ábalos, en el informe de la UCO podemos leer que Koldo llegó a contestarle al exministro a un mensaje con un "cuánto te quiero". En ese mismo informe vemos como Aldama felicitaba 'a HIDALGO' porque habían salvado a Air Europa:
Palabras clave
Otro clásico de las tramas de corrupción: las palabras clave. Llamar al dinero de otra forma es más que habitual. Unas veces se habla de "agua"como en el caso Púnica. En el caso Ábalos usan "aceite", "un eufemismo que utiliza Aldama para referirse al cash, al dinero en efectivo... Es la forma que él tiene para pedirle a empresarios amigos suyos que le den 'aceite para engrasar la máquina'... Esa máquina son, se supone, los altos cargos del ministerio de Transportes que luego les darían acceso a contactos que necesitaba la trama, contratos públicos o tal...", cuenta Elena Herrera, de eldiario.es
En el informe de la UCO vemos que los implicado hablan también de "café". No es porque tengan sueño, "es una expresión que utiliza Aldama cuando busca una comunicación segura con algún interlocutor. Por ejemplo a Jessica, la novia de Ábalos, le dice que "si puede un café".
"Según o la UCO lo que busca es hablar por una línea segura o tener un encuentro personal, porque lo que van a hablar es delicado no quieren que pueda ser interceptado", detalla Alfonso Pérez Medina.
La Familia
Sigamos con otro de los clásicos en casos de corrupción: los hermanos. En el 'caso Ábalos' es el hermano de Víctor Aldama quien, siendo escolta de Ábalos introduce a 'El Gominas' en el círculo del exministro. En el caso Lezo estuvo investigado el hermano de Ignacio González y en 1991 la implicación de Juan Guerraen un caso de corrupción hizo dimitir a su hermano Alfonso, todopoderoso vicepresidente de Felipe González.
Si sabes contar, te habrás dado cuenta de que he hecho un poco de trampa. Faltan dos preguntas "¿dónde?" y "¿cuándo?". Bien, la respuesta es fácil: en cualquier sitio y siempre que se pueda.
A cambio de este pequeño engaño, te dejo un extra descubierto en la hemeroteca de los 90 (prolija en corruptelas patrias) que no es corrupción pero que seguro que sabrás apreciar.
En abril del 91 se difundió una conversación de Txiki Benegas (entonces secretario de Organización del PSOE) en la que llamaba 'Dios' a Felipe González, 'el catalán' a Narcís Serra y 'el enano' a Carlos Solchaga. Por cierto que a Felipe González lo llamaba 'el one' (el uno), lo mismo que la trama Koldo a Sánchez. Quizás el mote sea lo único que, hoy por hoy, comparten el presidente del Gobierro y el expresidente González.
Una historia de auténticos espías
No solo fue a Bárbara Rey: viaje a la España de los 90 en la que el CESID espió a mansalva
Columnas de la Historia laSexta columna ahonda en los diarios del jefe de los espías de la época, Emilio Alonso Manglano, para reconstruir cómo el poder se movió entre las sombras para tapar sus vergüenzas o destapar las del contrario.