Les presentamos los casos más sonados de delincuentes económicos célebres que cambiaron los sillones de sus despachos por los camastros de sus celdas. Empezamos por un clásico: Jesús Gil. Presidente del Atlético de Madrid, alcalde de Marbella e inquilino del calabozo hasta en tres ocasiones. Carismático para unos, el demonio para otros y genio figura hasta la sepultura. Tras su muerte, en 2004, el Tribunal Supremo le declaró culpable de apropiación indebida del Club Atlético de Madrid, pero le absolvió por prescripción.
Seguimos con otro ilustre: Mario Conde. Presidente del Banesto con tan sólo 30 años y Doctor Honoris Causa de la Universidad Complutense por ser modelo de éxito en los 80 y 90. En 2001, la Audiencia Nacional le condena a 14 años por los delitos de estafa y apropiación indebida, y le obliga a devolver 7.200 millones de pesetas a Banesto. Evita la cárcel con una fianza de 500 millones de pesetas, una décima parte que la de Díaz Ferran, pero el Tribunal Supremo acaba ampliando la condena a 20 años. No es hasta 2007 cuando obtiene la libertad condicional y empieza una carrera política en Galicia sin demasiado éxito.
Continuamos con Javier de la Rosa. ¿Qué tiene en común con Díaz Ferrán? Además de un comportamiento "más que dudoso", la cantidad de su fianza. El financiero español conoce prisiones de media España y juzgados de la otra media, pero su principal "azaña" llegó en 1999 con el caso Torras.
Más recientemente podríamos hablarles del dueño de la agencia de valores Gescartera: Antonio Camacho. ¿Su condena? 11 años por apropiación indebida y falsedad documental. Tras hacer desaparecer 80 millones de euros de sus inversores, hoy en día se encuentra en segundo grado penitenciario, es decir, goza de largos permisos.
Y no queríamos acabar esta "selecta" lista sin citar dos casos más. El fallecido Mariano Rubio, todo un gobernador del Banco de España, que ingresó en prisión en 1996 por un delito de fraude a Hacienda en el llamado en el llamado 'caso Mariano'. Y, cómo no, el enemigo íntimo de Rubio: Ruiz Mateos, fundador del holding Rumasa.
Un País para Viajárselo
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