Los inquilinos de la Corrala la Utopía se niegan a desistir en su lucha por una vivienda digna y llevan ya 21 meses resistiendo desde que ocuparon estas casas propiedad de Ibercaja. “Mis padres se quedaron en paro… nos quedamos sin piso y aquí estamos. Yo no tenía dinero y me quedé en la calle. No podía pagar mi hipoteca”, nos cuenta uno de los vecinos.

Las familias manifestaron que llevan dos años pidiendo poder alquilar estas viviendas vacías y negociar su precio en función de los ingresos de cada uno. “No queremos estar por la cara, queremos pagar cada uno lo que pueda porque yo sólo tengo 400 euros”, dijo una vecina.

Con poco dinero pero ganas de luchar, incluso cuando les cortaron la luz y el agua para presionar, encontraron un lugar para protestar, la puerta del ayuntamiento de Sevilla. Tras recibir la noticia del desalojo dicen que seguirán luchando. “Y seguiremos, no nos vamos de aquí, que venga la policía si es necesario. Pero no nos vamos”, expresaron.