El joven que ha asesinado a toda su familia en Elche, Alicante, ha confesado que primero disparó a su madre, después a su hermano de 10 años y, por último, acabó con la vida de su padre cuando regresaba de trabajar.

Ahora, el menor se encuentra en un centro de menores de la Comunidad Valenciana, tras haber pasado tres días en dependencia policial. Según ha indicado Manu Marlasca, los policías que han convivido con él consideran que el menor irá comprendiendo lo que ha hecho con el paso del tiempo.

"Creen que cuando pasen los días ese desapego y esa distancia con la que hablaba de lo ocurrido le harán volver a la realidad", ha explicado el experto.

Una teoría que sostiene también la criminóloga Beatriz de Vicente: "Es una disociación, cuando con el tiempo se relaje probablemente se de cuenta de lo que ha hecho".

El joven relató el crimen con detalles sin ningún signo de arrepentimiento: "Me dijo que era un vago, que ya estaba bien y que me iba a quitar la consola. Subí a mi habitación, me puse a pensar y cogí la escopeta. Disparé dos veces a mi madre cuando estaba en la cocina. Un tiro por la espalda y luego la rematé. Mi hermano intentó escapar, pero salí detrás de él y lo cacé antes".