La química y divulgadora científica Déborah García ha explicado en Más Vale Tarde cómo evitar el riesgo al contagio en e l transporte público. Tal y como ha explicado la investigadora, estos lugares pueden ser un foco de contagio de coronavirus por la falta de restricciones de aforo y el riesgo de que no se controla que todos los usuarios lleven mascarillas homologadas.

Así, la divulgadora ha diferenciado en tres tipos de transportes públicos:

Tren: en el caso del tren, Déborah afirma que es importante tener aún más precauciones que en cualquier otro lugar público. Por eso, a pesar de que se recomienda para la población general el uso de mascarillas higiénicas o quirúrgicas, la científica apuesta por el uso de FFP2 en este caso.

"No sabes si la gente que te rodea va a llevar una buena mascarilla, la va a llevar bien puesta o va a hacer uso de ella todo el trayecto, porque hay personas que comen y beben mientras", ha explicado. Por eso, ha dicho, lo más recomendable es el uso de una mascarilla que nos protege a nosotros y protege al resto, es decir KN95 o FFP2.

Aviones: todos los vuelos tienen un sistema de ventilación particular. Los aviones poseen filtros HEPA, que son filtros que se utilizan en quirófanos, realizados con fibra de vidrio, por lo que filtran muy bien los virus y bacterias.

Estos filtros se sitúan en la parte superior del avión, porque el aire en estas cabinas circula de arriba a abajo, no en horizontal. Así, intercambian el aire cada cinco o diez minutos, pero no se debe bajar la guardia. "Al final, la persona que está contagiada podría estar a tu lado, en ese caso si te habla o te tose estás absolutamente expuesto y no hay ningún filtro que te proteja", ha explicado Déborah García.

Además, en el caso de los aviones ocurre lo mismo que con los trenes: no hay control de aforo ni de mascarillas, por lo que nunca se sabe si estamos en contacto con el virus.

"Hasta que las aerolíneas o las autoridades no obliguen a dar a todos los pasajeros una mascarilla homologada y expliquen cómo utilizarla, si viajamos en avión deberíamos usar una mascarilla que nos proteja también a nosotros", ha explicado la divulgadora.

¿Sirven de algo los controles de temperatura?

Los aeropuertos están implementando algunos controles de temperatura, pero, ¿sirven para algo? Según la científica son limitadas, el motivo es que solo la mitad de las personas con coronavirus pasan la enfermedad con fiebre.

Además, el coronavirus no es el único motivo por el que se puede dar fiebre. De hecho, también hay irresponsables que falsean este tipo de pruebas: los antitérmicos eliminan la fiebre y, en muchas ocasiones, basta con refrescar la cara para evitar que el termómetro de frente mida la temperatura corporal de una persona con fiebre.