Los vecinos del barrio de Les Corts, en Barcelona, se han llevado un tremendo susto al encontrarse a una serpiente pitón enroscada a un árbol. El animal, de 7 años y 15 kilos, se encontraba justo sobre el escenario de una actuación infantil.

Los bomberos atendieron al aviso de un vecino y tuvieron que hacer uso de hasta cinco vehículos, entre ellos una grúa móvil para rescatar a esta serpiente, cuya posesión es ilegal, y que se cree que podría ser la mascota de algún vecino del barrio. El animal ya está en manos de la Asociación Protectora de Animales Exóticos de Cataluña, mientras que la Guardia Urbana está buscando a su dueño.

"A mi me tienen que sacar el desfibrilador y no me recupero", comenta Cristina Pardo sobre cómo reaccionaría de encontrarse con una serpiente como esta, a lo que añade que "no hace falta que se me anude al cuello para que me dé un tabardillo".