El futuro de la bolsa de Estados Unidos podría estar en manos de 'El Risitas'. Pero no, no te asustes. Resulta que la risa contagiosa de este conocido personaje español, fallecido en abril de 2021, se ha puesto de moda entre los brokers de Estados Unidos. Usan sus vídeos en redes sociales para comentar cuando una acción se la está pegando. Es tal el 'hype' que en el mismímimo 'Financial Times' han propuesto a los futuros inversores que cuenten los tuits con el meme del Risitas para ver si una empresa va a subir o a bajar.

Está claro que es una broma, pero ojo, porque hay indicadores económicos muy serios y otros no tanto. Así lo ha analizado en laSexta Clave el periodista Paco Rubio, explicando que, aunque hay algunos que, a pesar de todo, pueden ser muy útiles. Por ejemplo, el 'índice Big Mac': este sirve para medir el nivel de vida de un país, el poder adquisitivo de sus habitantes. ¿Por qué se utiliza? Porque McDonalds y su hamburguesas están presentes en prácticamente todo el mundo.

¿Y en qué consiste? Básicamente se mira el precio medio de un Big Mac en cada país y se convierte en dólares. Haciendo eso con todos los países, se elabora un listado en el que, si ese precio está más arriba en el Índice Big Mac, se nos indica que son los países en los que sus habitantes tienen un mayor poder adquistivo. Por ejemplo, en el 'top 5' tenemos países como Suiza, Suecia, Noruega, Estados Unidos o Israel. Y a la cola tenemos al Líbano, Rusia, Turquía y Sudáfrica. Aunque es verdad que no todos los países del mundo están en este 'índice Big Mag'.

No es el único: hay otros indicadores que sirven para saber si la economía está yendo a mejor o a peor. Para eso está, por ejemplo, el 'índice de la barra de labios'. Es un indicador que inventó el presidente de la marca de cosméticos 'Estee Lauder', que en la crisis de los 90 se dio cuenta de que las ventas de sus pintalabios se dispararon; según Leonard Lauder, porque las mujeres no podían comprar otros artículos más caros como vestidos, bolsos o zapatos. Así que la barra de pintalabios era el único pequeño lujo que las mujeres se podían permitir. Esto siempre, según la teoría de Leonard Lauder.

Existe otra versión con la venta de corbatas, aunque no funciona igual. Cuando la economía sufre curvas, la venta de corbatas sube. ¿Por qué? Supuestamente, por motivos laborales y de apariencia. Los hombres compran esta prenda para ser más reconocidos por sus jefes, para aparentar que trabajan más duro, para parecer más serios y responsables. De hecho, unos datos recogidos por el 'Financial Times' muestran cómo iba subiendo poco a poco la venta de corbatas en Reino Unido en los años en los que nos a íbamos adentrando en la crisis mundial de 2008.