Los aficionados al automovilismo norteamericano han disfrutado esta madrugada de una de las mejores carreras de los últimos tiempos. Daniel Suárez, que se habría quedado a la cola del grupo por un accidente en la segunda vuelta de carrera, se metió en la pelea gracias a un coche de seguridad a falta de cinco de los 260 giros de la carrera de Atlanta.

Al relanzarse la carrera, Suárez se colocó a rebufo de Busch y Blaney y entró en la meta en un triple paralelo que dejó desconcertados a los comisarios, que durante unos instantes no supieron quién había rebasado primero la línea.

Tras revisar la 'foto finish', declararon al mexicano como ganador por tan solo tres milésimas de segundo sobre Blaney y cuatro sobre Busch, que acabó tercero.

"Ha estado muy cerca, tío. Muy cerca. Fue una buena carrera", dijo Suárez al bajarse del coche.