Javier Gómez de Liaño se escuda en el secreto profesional para evitar contestar a una delicada pregunta: "No sé si existen grabaciones de miembros del PP, pero aunque lo supiera, no lo contaría". Sobre los ordenadores, lo tiene claro: "El señor Bárcenas, cuando deja el PP, lo primero que hace es reclamar esos ordenadores pero se le niegan. Incluso acude a un juzgado, que reconoce que son propiedad del PP".

El letrado ha criticado duramente el borrado de datos de los discos duros: "Cuando existe un proceso penal en marcha, hay que preservar y poner a disposición judicial lo que puede ser considerado como prueba", señala, "Si uno de los motivos principales para mantener en prisión a Bárcenas es el riesgo de destrucción de pruebas, me pregunto si ese riesgo no lo están generando otros".

De dato tan crucial como los SMS, Liaño confiesa: "Me enteré por la prensa". Pero tiene claro que su defensa "no puede basarse en este tipo de material". A pesar de tener todo en contra, el abogado tiene "una fe casi ciega en que se puede llegar a conseguir la libertad para mi cliente", y está convencido de que el juez Ruz "llegará hasta el final en el caso de financiación ilegal del PP".

A Liaño le molesta que se prejuzgue a su cliente: "Uno de los principios básicos del Estado de Derecho es que cualquier persona tiene derecho a ser considerado inocente hasta que un tribunal lo declare culpable". Esto supone, según Liaño, que "no le corresponde al señor Bárcenas demostrar que su dinero tiene procedencia lícita", a pesar de encontrarse en la cárcel "de manera preventiva".

Sobre las cuentas de Bárcenas, Gómez de Liaño no sabe "si hay más titulares que el extesorero, aunque su explicación es que no los hay". De todas formas, ha querido señalar el interés judicial en este caso: "No recuerdo ningún caso en la historia de la Audiencia Nacional en que se hayan llevado a cabo comisiones rogatorias tan exhaustivas y tan intensas".

¿Guarda Bárcenas algún as en la manga? Liaño lo tiene claro: "En mi lenguaje no existe la expresión 'tirar de la manta'. No creo que haya munición ni bombas atómicas contra el Gobierno". Y sobre posibles contactos con el PP, como han trascendido de sus predecesores, sentencia: "Ni el PP llama a este letrado, ni este letrado llama al PP ni a ningún otro partido".