Máximo Huerta recuerda cómo una Nochevieja su padre sufrió un accidente de tráfico con el camión. "No llegaba, no llegaba... y no llegó", cuenta el escritor, que recuerda cómo les avisaron por teléfono: "Mi madre me dejó en casa de unos vecinos". "Lo dejaron en un hospital de monjas y lo cosieron para enterrarlo, con lo cual lo cosieron mal, con cristales y hierros", destaca Máximo Huerta.

"Mi madre decía que olía a muerto", recuerda el periodista, que explica que "pronto se dieron cuenta de que estaba vivo y le cambiaron de hospital y empezaron a limpiarlo": "A partir de ahí el carácter de mi padre cambió y nunca fue el mismo". "Fue un hombre tocado por el accidente, él era un toro y eso lo maltrató", afirma Máximo Huerta, que se reencuentra en este vídeo con un camionero compañero de trabajo de su padre y una de las personas que vio el accidente.