Ni el excelente cocido madrileño de Tomás, el padre de Ainhoa, consigue que los concursantes de Batalla de restaurantes Madrid entierren el hacha de guerra. Los segundos platos les han dejado con mal sabor de boca y no dudan en dejarlo claro ante Alberto Chicote en cuanto tienen ocasión.

"¿Diríais que el cocido está por encima de estos cuatro platos?", quiere saber el presentador. "El problema ya no es que esté por encima, sino que estos platos están muy por debajo", sentencia Miguel, de Descaro, con contundencia. En cocina, Ainhoa escucha atónita los comentarios de sus rivales. "Voy a matar a alguien antes de que acabe el programa", se desahoga.

La joven hostelera está indignada. "Me parece mal, me parece que hacen comentarios de cosas que no...", se queja ella, sin lograr ni acabar la frase. Su padre intenta quitarle hierro al asunto. "No te preocupes, cada uno queda en su sitio", le dice con paciencia.