"No os podéis imaginar el calvario que supone llegar al plató por las mañanas. Cada día cambia la orientación no de una, sino de doce calles, de forma que se convierte en un laberinto que eso... eso es un 'escape room'", se quejaAlfonso Arús mientras los colaboradores se ríen a carcajadas.
Y es que los aruser@s se enfrentan cada día a una auténtica yincana para ir a trabajar a causa de las obras que se están llevando a cabo en el polígono donde se ubica el estudio. "Empiezas a circular por esa calle y cuando llegas al final hay una valla y tienes que volver a maniobrar y otra vez salir de allí", añade Angie Cárdenas. Es por eso que la tertuliana ya ha decidido saltarse "todo tipo de normas". "Yo voy en dirección prohibida", reconoce.
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Pero no es la única que no respeta las señales, confirma Tatiana Arús. Y es que, al parecer, es imposible salir del polígono siendo legal. "Un escape room a las 4 de la mañana, sin luz, con unas vallas que no se ven y el sentido de las calles que cambia todos los días", resume el presentador. "Me cruzo de cara con Llobet y yo creo que iba en prohibida yo, o él, no lo sé. No sé quién iba bien de los dos, la verdad", dice Rocío Cano muy confundida.